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La partida de María Noseda, la viuda de Angelini

“No quería placas ni su nombre en las instituciones que apoyaba”, cuentan sus cercanos.

Por: L. Gómez Y J. Esturillo | Publicado: Martes 17 de abril de 2018 a las 04:00 hrs.
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“El mejor homenaje que se le puede hacer es no decir nada, era muy reservada y una gran mujer”. Esa fue la frase con que el médico Luis Fernando Coz recuerda a María Noseda Zambra quien falleció a sus 95 años de edad.

La mujer a la que la revista Forbes le atribuyó un patrimonio de US$ 1.000 millones cultivó un bajo perfil y gran sencillez en sus gustos, pese a ser ubicada como una de las más ricas del planeta.

“Marita”, como le dicen sus cercanos, nació en Chile pero siempre estuvo ligada a Careno, el pequeño pueblo italiano donde nacieron sus padres.

De un humor crítico y carácter amable, se mantenía al tanto del acontecer nacional y se preocupaba por los más desposeídos, razón por la que enfocó su ayuda en los niños y los ancianos. Tenía una mirada crítica frente al excesivo consumismo, convencida que la felicidad estaba en las cosas sencillas.

“Ella tenía el criterio de que para ser feliz se necesitaba tan poco y estaba convencida de eso, por eso prefería ayudar a los que tienen poco para que puedan vivir mejor y ser felices, así era ella”, recuerda desde Italia el sacerdote Marcelo Gidi Sj, quien la acompañó desde que enviudó y además, forma parte del directorio de la Fundación Careno, que la viuda de Angelini formó para destinar su patrimonio a la beneficencia.

Aquejada de una enfermedad pulmonar, con los años se alejó de las actividades fuera de su hogar debido a su avanzada edad, sin embargo recibía visitas de sus cercanos como el padre Gidi, Roberto Angelini o Paola Davanzo, su estrecha colaboradora.

De una profunda fe católica, María Noseda destinaba a donaciones y acciones benéficas parte de los dividendos que generaba su casi 11% en inversiones Angelini y Compañía limitada, el family office que formó su esposo. Estos aportes se canalizan a través de su fundación, constituida en 2012.

Llevaba unos cinco años alejada de las actividades del conglomerado y unos dos retirada del directorio de la fundación.

“Ella siempre ayudó y, después que enviudó, dijo que no iba a alcanzar a distribuir todos los recursos que provenían de su herencia familiar y conyugal, por eso decidió crear una fundación que es su legado. Dejó claramente establecidos los criterios de acuerdo a como estuvo marcada su vida”, agrega Gidi.

El destino principal era la fundación Belén Educa, aunque también figuraban entidades como el Hogar de Cristo, Cristo Vive y la Corporación de Jesús Niño.

Además, en forma anónima realizaba constantes aportes a otra serie de instituciones benéficas y de ayuda de la sociedad civil e incluso en forma directa a personas que pasaban por distintas situaciones de apremio.

Y es que a Marita no le gustaba la vida pública, prefería el anonimato cuando de ayudar se trataba.

“No quería ni placas, ni el nombre de ella en las instituciones (que apoyaba), por eso uno de los criterios que tenemos en la fundación es el anonimato”, comenta Gidi.


 Su círculo de confianza

Tras la muerte de su esposo Anacleto, María Noseda comentó a Revista Capital que se sintió muy sola. La pareja, que no tuvo hijos, tuvo como su familia más cercana a sus sobrinos nietos, hijos de Roberto y Patricia. Pero Marita también tenía un círculo íntimo encabezado por el abogado Manuel Enrique Bezanilla, quien era su hombre de confianza dentro y fuera de la Fundación Careno. Bezanilla le ayudo a crear su brazo solidario y canalizar su beneficencia a las instituciones.

En su red de apoyo más íntima también estaba Paola Davanzo. Ella es hija de una amiga muy cercana de su juventud y se convirtió en su asistente, secretaria y apoyo para todo lo que Marita hacía, por lo que la visitaba todas las semanas en su departamento en Américo Vespucio y compartía con ella.

Sus cercanos comentan que durante los últimos años la señora María, como también le dicen, se levantaba algunas horas en el día en su casa a leer el diario. Lejos estaban las reuniones con sus amigas entrañables de la colonia italiana y de la Cruz Roja, entre las que destacan su amiga que ya falleció Eliana Borgheresi, madre del escritor chileno Pablo Simonetti, y Letizia Garbaccio, una de las pocas amigas que le sobreviven.


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Partida marca traspaso de fortuna total a cuarta generación

Con la partida de María Noseda, se activaría la fase final del traspaso de la participación que ella mantuvo en el holding, que ayudó a forjar junto a su esposo Anacleto Angelini, uno de los conglomerados industriales más grandes del país. Su matriz Antarchile está valorizada en US$ 8.349 millones

A través de un testamento su esposo, Anacleto Angelini, quien falleció en 2007, estableció como herederos a los hijos de sus sobrinos Roberto y Patricia. En materia patrimonial, Noseda integró el holding creado por don Anacleto, denominado Inversiones Angelini y Compañía Limitada, al cual se integraron Roberto y Patricia Angelini, y los siete sobrinos nietos de don Anacleto, a través del testamento de este último. El ingreso de la tercera y cuarta generación del clan a la propiedad de Inversiones Angelini y compañía se concretó a través de diversos aumentos de capital. Todos ellos elevaron su participación en forma directa e indirecta en la matriz de Copec.

El principal activo de Inversiones Angelini es la sociedad anónima abierta Antarchile, de la cual la familia controla, directa e indirectamente, el 74,014%.

En la memoria 2017 de Empresas Copec se especifica que la viuda del empresario mantenía el 10,94% de la mencionada sociedad con una valor equivalente de unos US$ 900 millones.

Mientras que los cuatro hijos de Roberto participan en Inversiones Angelini a través de la sociedad Golfo Blanco, con el 18,3%, y los tres de Patricia lo hacen vía Senda Blanca que, de acuerdo con la memoria 2017 de Empresas Copec, tiene el 14,8%.

No hay claridad respecto a que si los recursos provenientes del casi 11% que Noseda mantiene directamente en la sociedad controladora Antarchile, serán destinados íntegramente a Careno o si parte de ellos serán para la cuarta generación del clan.

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