Felipe Díaz: “La inversión en el extranjero va más de la mano con un proceso natural de sofisticación de los inversionistas locales, que con la situación política”

El proceso de elaboración de la nueva Constitución ha generado una sensación de incertidumbre no sólo en el mundo político, como es natural, sino también en materia de inversión. Ello debido a que se desconoce la profundidad de los cambios que podrían afectar al modelo económico. Es por esta razón que el socio de EDN Abogados, Felipe Díaz entra al debate, descartando de plano que se esté produciendo un éxodo de capitales. Más bien, reflexiona, lo que está ocurriendo en nuestro país aceleró algo que ya venía sucediendo, como es que muchas empresas y personas naturales se están abriendo a nuevas inversiones en el exterior.

En su área de práctica asesora a clientes internacionales y locales en diversas transacciones ligadas a fondos de inversión; y en el desarrollo y financiamiento de proyectos en representación de instituciones financieras y corporaciones. En este sentido, ha visto de cerca los cambios que se están produciendo en materia de inversión y desdramatiza el escenario.

-¿Cómo percibe que han reaccionado las empresas al proceso político chileno?
-Generalmente me toca representar empresas que van a invertir fuera, que era algo que ya se venía desarrollando hace un tiempo, pero el contexto político y económico ha acelerado ese proceso de internacionalización en sus inversiones. Vemos una tendencia, si pensamos en inversionistas institucionales, en los fondos de pensiones, porque hace un tiempo que su colocación en el extranjero era cada vez mayor, este contexto lo que ha hecho es acelerar una tendencia que ya se venía produciendo.

-Es sabido que esa industria invierte en el extranjero, pero ¿esto se ha acelerado también en otras?
-Hay ciertos actores que han aprovechado esta mayor colocación en el extranjero, como administradoras de fondos locales, que han ido a establecer sus propias estructuras afuera, en jurisdicciones que son bastante más sofisticadas que la chilena. Lo que ha traído un sin número de desafíos, pero también de oportunidades para estos actores.

-¿Qué oportunidades, por ejemplo?
-Vemos cada vez más actores del mercado financiero local, principalmente gestoras de inversión, que han adelantado sus etapas de internacionalización, precisamente para atraer este flujo de inversión, generando sus propias estructuras en mercados más sofisticados como el de Luxemburgo. Esto traerá como consecuencia que dichos gestores de inversión puedan acceder ya no solo a inversionistas locales, si no también, a grandes inversionistas internacionales que valoran la experiencia local pero que por políticas internas deben invertir a través de jurisdicciones más reguladas que la chilena.

-Hay inversionistas extranjeros que han señalado que el proceso político chileno no los inhibe de invertir en nuestro país, ¿por lo que usted ha percibido ha sido así?
-Tengo la impresión de que, principalmente, en las industrias de energía y tecnología no se ha producido una contracción per se y los planes de inversión han continuado. Sobre todo en lo que dice relación con energías no convencionales. Lo que sí veo es la incertidumbre que tienen las empresas locales en sus inversiones en Chile, que están más preocupadas de ver cuál será el desenlace político para definir su plan de inversión en el corto plazo.

-¿Qué pasa con las personas individuales, los altos patrimonios, por ejemplo, también están invirtiendo más fuera de Chile?
-Los altos patrimonios -más por el hecho de que eran normalmente inversionistas que estaban muy radicados en Chile, con mucha presencia acá- se han abierto a oportunidades en otros mercados, que son más sofisticados, como Estados Unidos; que buscan un mayor dinamismo económico y este contexto político y económico actual les permite, obliga o incentiva a adelantar estos procesos de diversificación en sus portafolios.

-¿Y en qué áreas invierten más?
-Por regla general, siempre ligados a temas inmobiliarios, a temas más bien tangibles, relacionados con activos alternativos. Creo que ese es el principal foco de una inversión que se puede hacer en otro país y que va a tener cierto sustento de liquidez, pero con un activo real detrás.

La incertidumbre contribuye a la precaución

-¿Que estos altos patrimonios estén comenzando a invertir fuera del país cuánto perjudica a la economía nacional?

-Tengo la impresión de que es sólo una parte de su patrimonio, que es una parte líquida, la que invierten en otros lugares. No la veo como una parte relevante. Sí se pueden observar algunas oportunidades con respecto de ciertos activos que han tenido una baja en precio, que anteriormente no tenían. Como los activos inmobiliarios, que en Chile ha sido un activo que suele apreciarse y que venía apreciándose hace mucho tiempo; quizás ahora estamos viendo una pequeña tendencia a la baja en algunos sectores. Por lo tanto, creo que la inversión dice relación más bien con una diversificación de portafolio que con un contexto negativo total. Yo preferiría quedarme con una idea de incertidumbre, de diversificación de portafolios, más que de éxodo de capital.

-Entonces, ¿sería muy aventurado decir que el proceso político es el que ha impulsado la inversión fuera de Chile?
-Sin duda la incertidumbre contribuye a ser más precavidos en las inversiones, por lo que hemos observado empresas que son más precavidas en sus inversiones locales hasta tener cierta claridad con respecto a cómo va a ir evolucionando el escenario político. Y la inversión en el extranjero va más de la mano con un proceso natural de sofisticación de los inversionistas locales, que tiendo a verlo como una oportunidad de entrar a otra liga. Por ejemplo, en el caso de los gestores locales de inversión, de atraer ya no sólo inversionistas chilenos, sino también extranjeros que valoran muchísimo su experiencia en Latinoamérica, pero para quienes jurisdicciones como Luxemburgo son más familiares. Entonces, se combina el factor de la experiencia latinoamericana, que es muy relevante, con la jurisdicción más conocida para estos otros inversionistas.

-Insisto ¿este proceso puede tener efectos en la economía nacional?
-Se puede producir cierta contracción en la inversión en corto plazo. Sin perjuicio de lo anterior, el dinamismo y las bases económicas se mantienen sólidas, a este minuto; entonces, no tendería a mirarlo desde una perspectiva pesimista, sino respetar la incertidumbre que genera este contexto y tratar de valorar este nuevo proceso que ha adelantado la coyuntura, que significa salir de un espectro local y aprovechar ese nivel de sofisticación que tiene nuestro mercado, dando este salto a jurisdicciones que son mucho más evolucionadas en aspectos financieros, como son Estados Unidos, Luxemburgo, entre otras.

-¿Se puede inferir, entonces, que el proceso político no ha afectado gravemente a la economía hasta ahora y que incluso ha sido positivo el efecto en materia de inversión, acelerando un proceso que venía dándose muy lentamente?
-Sí, al menos yo, creo que se ha acelerado un proceso que era natural, tanto de los inversionistas institucionales importantes, como son las AFP. Y también vemos estos actores profesionales, ligados a este tipo de inversiones, que han hecho este salto a jurisdicciones más sofisticadas. Trato de pensar positivo en el escenario y, en definitiva, los actores que participamos en la economía hemos tenido que adaptarnos a este contexto, quizás abordar los desafíos que implica jugar en otra liga, tanto idiomáticos como de procedimientos internos; pero es una oportunidad para abrir nuestro mercado ya no sólo como un ente exportador, sino como un proveedor de servicios en otras plataformas, en otras estructuras y en otras jurisdicciones.

-¿El aumento de la inversión de las AFP fuera de Chile será una consecuencia directa de los retiros?
-Efectivamente, puede haber un link en ese contexto. Yo soy abogado no economista, por lo que me es difícil hacer un análisis desde una perspectiva puramente económica, pero hay ciertas variables que apoyan ese contexto, en las cuales la necesidad de liquidez para poder abordar estos retiros es mucho más fácil de abordar en un mercado más grande -como sería en el extranjero- que en Chile. Si se salen a liquidar esas posiciones en Chile, el efecto en el mercado es mucho mayor que lo que ocurre cuando se tiene una colocación importante fuera.