Kit bioidentificador de patógenos en vino inicia etapa comercial

Desde sus inicios en 2002, la Fundación Copec UC ha estado enfocada en el apoyo y la promoción de la investigación científica aplicada relacionada a los recursos naturales, para lo que realiza anualmente tres concursos de innovación -dos de los cuales están actualmente abiertos- y cuenta con un fondo de capital de riesgo que invierte en empresas de base tecnológica para sus escalamientos.

Fue precisamente a través de uno de sus concursos que un equipo conformado por los investigadores Alejandro Maass, Verónica Cambiazo y Mauricio González, del Centro de Modelamiento Matemático y el Centro para la Regulación del Genoma de la Universidad de Chile se adjudicaron hace dos años $ 70 millones para desarrollar un k+it de diagnóstico de levaduras en vino, que permite ser precisos y oportunos en la toma de decisiones frente a la presencia de patógenos contaminantes, aunque estén presentes a baja escala.

Maass cuenta que el producto está siendo utilizado por la Viña San Pedro Tarapacá, colaboradora en el proyecto desde sus inicios, y está protegido bajo secreto industrial. Es así como han podido validar su efectividad, obteniendo información más detallada y rápida en relación al sistema de detección en placa utilizado tradicionalmente en viñedos en Chile, permitiendo identificar el tipo de patógeno y su cantidad de manera exacta. "Se trata de un kit que hemos ido optimizando con el tiempo y que lo hemos usado en el control de calidad de algunas etapas de producción, sobre todo en control de calidad del embotellado", explica.

Acaban de iniciar la etapa de lanzamiento oficial como servicio desde el Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos (INTA) de la U. de Chile, además de la etapa comercial para venderlo directamente como producto.

De este modo, el gerente de administración y finanzas de Fundación Copec UC, Carlos Márquez, señala que esta solución tecnológica permite mejorar la competitividad de la industria vitivinícola nacional, fortaleciendo la presencia y el prestigio del vino chileno en los distintos mercados donde compite.