España sufre el peor ataque terrorista desde 2004

Al menos trece personas murieron y más de un centenar resultaron heridas ayer en Barcelona en lo que las autoridades calificaron como un atentado terrorista.

Una furgoneta se estrelló contra una multitud en el paseo peatonal Las Ramblas. Según testigos, el vehículo avanzaba a 80 kilómetros por hora en zigzag y logró atravesar gran parte del paseo antes de detenerse. El hecho interrumpió el verano boreal, cuando la capital catalana se llena de turistas.

Medios españoles informaron además que el conductor armado salió de vehículo y se encerró en un bar del centro barcelonés, forzando negociaciones policiales. Sin embargo, las autoridades aseguraron que "nunca hubo situación de rehenes".

Operación jaula

Luego del ataque, la policía activó la llamada "operación jaula", instalando controles policiales en todas las salidas de la capital catalana para evitar la huida de los sospechosos, logrando detener a dos de ellos.

Uno, Driss Oukabir, de raíces magrebíes y con documentos de permanencia, habría arrendado el vehículo para el ataque –una furgoneta Fiat de color blanco-, aunque anoche medios españoles ponían en duda que se tratara de su real identidad. El nombre del otro no fue revelado, pero se sabe que es español. La organización terrorista Estado Islámico (ISIS) en un comunicado afirmó que los atacantes eran "soldados" de ISIS.

A la vez, la policía encontró otro vehículo relacionado con el atentado, en el cual se presume que los atacantes pretendían huir del lugar, en la ciudad cercana de Vic, a unos 60 kilómetros de Barcelona.

Tras el ataque, el metro y la red de transporte público del centro de la capital catalana fueron cerrados, mientras que los servicios de emergencia pidieron no acercarse a la Placa de Catalunya, la plaza central donde empieza el paseo peatonal.

En un incidente separado, dos policías de control de seguridad en las afueras de Barcelona fueron arollados por un auto. El conductor fue abatido y los expertos estaban revisando si el vehículo tenía explosivos. Pero no estaba claro si el hecho estaba relacionado con el atentado.

Muestras de apoyo

La comunidad internacional expresó sus condolencias. El presidente de EEUU, Donald Trump, afirmó que el país está "dispuesto a ayudar" a las autoridades españolas, y la canciller alemana, Angela Merkel, calificó el atentado como "repugnante". Otras condenas llegaron desde autoridades de Europa, el Reino Unido, Francia, Rusia, la OTAN y el Vaticano. La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, manifestó en Twitter su "rechazo más absoluto" al atentado y "solidaridad con las víctimas y sus familias"

Una serie de ataques en vehículos desde julio del año pasado ha quitado la vida de más de 100 personas en Niza, Berlín, Londres y Estocolmo. El atentado de ayer es el más sangriento en España desde marzo de 2004, cuando una serie de explosiones en los trenes de Madrid mató a 191 personas.