PIB de EEUU bate récord y rebota un histórico 33,1% en el tercer trimestre

Luego de una contracción nunca antes vista, se esperaba que el rebote del Producto Interno Bruto (PIB) en Estados Unidos fuera sin precedentes. Y así fue.

A solo cinco días de las elecciones presidenciales, el Departamento de Comercio reveló que el PIB se expandió 33,1% en el tercer trimestre, un máximo histórico para la principal economía del mundo.

La fecha de publicación no es para nada irrelevante, ya que la gestión económica y la expansión esperada es uno de los principales activos de la campaña de Donald Trump para disputar la reelección en la recta final.

Tras publicarse el histórico rebote, el mandatario escribió en su cuenta de Twitter que le "alegra" conocer este dato antes de la votación del 3 de noviembre, y lo calificó como "el más grande y el mejor de la historia de nuestro país". "El año que viene será FANTÁSTICO!!!", aseguró.

La cifra supera con creces la expansión récord de 16,7% del primer trimestre de 1950, e incluso fue incluso más positivo que las expectativas del mercado, que proyectaba un crecimiento de 31%.

Además, el dato significa un salto sin precedentes en relación al segundo trimestre, cuando el derrumbe del PIB fue de un histórico 31,4%, que más que triplicó la merma de 10% del primer trimestre de 1958, hasta entonces sin comparación, según la serie que comienza en 1947.

Consumo e inversión

La expansión responde a la reapertura de la economía fuertemente golpeada por las cuarentenas y cierres de abril a junio, y fue impulsada por el aumento del consumo -que creció un 40,7%-, la inversión interna privada bruta y residencial -con alzas de 83% y 59,3%, respectivamente-, además de una mejora en las exportaciones.

Sumado a ello, la recuperación de la actividad de los consumidores también jugó un rol clave, ya que equivale al 68% del PIB.

Sin embargo,aunque las tiendas, restaurantes y bares se vieron favorecidos por la vuelta de los clientes, parte importante del país mantuvo precauciones por la situación epidemiológica.

Cautela ante todo

Y es que pese al crecimiento récord, economistas advierten que todavía es muy pronto para cantar victoria.

Tomando en cuenta que los contagios de Covid-19 han alcanzado nuevos máximos en los últimos días, sumado a que no es evidente que se acuerde otro plan de estímulo, el economista jefe de Capital Economics para EEUU, Paul Ashworth, alertó que "los avances adicionales serán mucho más lentos". Así, proyecta que el crecimiento del PIB del cuarto trimestre sería de apenas 4,5%.

Además, EEUU solo ha recuperado dos tercios de lo perdido el segundo trimestre, sumado a que el PIB se mantuvo 2,9% por debajo de su nivel en el tercer trimestre de 2019 y 3,5% bajo de su valor en el cuarto trimestre del año pasado.

En la misma línea estuvo el análisis de Biden tras conocer el PIB del tercer trimestre, quien en su Twitter comentó que aunque el dato creció, "las visitas a los bancos de alimentos no se han ralentizado y la pobreza ha aumentado".

"Estamos en camino de la peor recesión económica en más de 70 años, y Donald Trump está en camino de ser el primer presidente desde Herbert Hoover en dejar el cargo con menos empleos que cuando llegó", criticó.

Si bien la economía ha creado empleos, no ha logrado recuperar la mitad de los 22 millones de puestos de trabajo perdidos en marzo y abril, sumado a que la tasa de desempleo está en 7,9%, más del doble de los niveles precoronavirus.

Empleo sorprende

A pesar del panorama general, las cifras semanales de nuevos desempleados sorprendieron para bien, cayendo a su mínimo desde marzo.El Departamento del Trabajo reveló que las solicitudes de subsidios por desempleo llegaron a 751 mil nuevos pedidos del beneficio, por debajo de los 791 mil reportados el jueves pasado y de las 778 mil nuevas personas estimadas por economistas.

Las solicitudes continuas por desempleo -o sea quienes han recibido el beneficio al menos dos semanas consecutivas- cayeron en 709 mil personas, llegando a 7,75 millones.

La mejora se está dando pese a la falta de acuerdo por un nuevo plan de estímulos, algo que se espera que la Reserva Federal vuelva a plantear como urgente tras su reunión de política monetaria de la próxima semana, que concluye el jueves.