Banca & FinTech

Modelo de pago digital de cuatro partes: En qué consiste y sus posibles consecuencias

El nuevo sistema de pago que impulsado por la cartera de Hacienda se implementará a partir de marzo de este año y traerá consigo notables cambios al modelo comercial actual.

Por: C. Saravia | Publicado: Martes 4 de febrero de 2020 a las 18:32 hrs.
  • T+
  • T-

Compartir

Últimamente el modelo de cuatro partes con el que contará el sistema de pago digital de las tarjetas de crédito a partir de marzo es uno de los temas de los cuales más se ha hablado debido a su pronta implementación y los cambios que esta propuesta generaría al interior del comercio.

Esto porque el plan ideado por el Ministerio de Hacienda y que desde el año pasado pelea por salir a la luz, podría generar cambios en la forma de operar del sistema, según señala Roberto Opazo, socio fundador y director ejecutivo de Khipu, una empresa que ofrece servicios de pago a comercios en el país.

¿Cómo funciona el modelo de cuatro partes?

Actualmente el sistema de pago digital de las tarjetas de crédito y débito en Chile involucra a tres agentes: Un usuario, el comercio y una entidad bancaria que funciona como emisor y adquirente de forma simultánea. De esta manera, el comercio realiza la venta de sus productos a través de un adquirente -como es el caso de Transbank-, quien actúa como puente entre el usuario y el banco a través de las transacciones de crédito o débito.

Al realizar una compra, la entidad bancaria cobra una tasa de interés -conocida como "tasa de intercambio" y la cual es fijada con anterioridad- al adquirente por realizar la compraventa. Y del mismo modo, el adquirente exige al comercio un monto extra por efectuar el pago, lo que se conoce como "merchant discount".

Sin embargo, y a diferencia de la mayoría de los países, las entidades bancarias y los adquirentes en Chile funcionan como una sola colectividad, lo que ha dificultado en gran parte la competencia entre emisores, por lo que la cartera de Hacienda propuso en 2019 separar a ambas entidades para eliminar así el dominio que una tiene sobre la otra.

De esta forma, la serie de transformaciones daría paso a un agente más dentro del sistema de pago, el cual quedaría formado por el usuario, el comercio, el banco y el adquirente cada uno de manera autónoma, lo que implicaría que ciertos bancos dejen de figurar, por ejemplo, como "dueños" de Transbank.

Lo más leído