Editorial

Chile hacia el Pacífico

  • T+
  • T-

Compartir

Imagen foto_00000001

uestro país cumple 25 años como miembro del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico justamente cuando le toca ser la sede del encuentro anual de la organización. Ello coincide con momentos de preocupante tensión debido a la guerra comercial que libran sus dos principales economías —Estados Unidos y China, las dos mayores del mundo—, y a la vez con un complejo escenario económico para América Latina, lógicamente el primer espacio de proyección e integración internacional de Chile.

Lo cierto es que, pese a los esfuerzos de Chile y por circunstancias de diversa índole —con gran frecuencia de raíz política—, la integración económica con nuestros vecinos latinoamericanos ha avanzado lentamente y con demasiados tropiezos. El potencial es enorme, pero sigue siendo desaprovechado.

Por el contrario, nuestra vinculación con las 21 economías del Asia-Pacífico que integran APEC —que además de las dos principales incluyen a potencias como Japón, Corea del Sur, Taiwán, Australia o Canadá—, se ha estrechado y profundizado aceleradamente en las últimas dos décadas y media. Reflejando, en cierta medida, el mayor peso que esa región del mundo ha ido adquiriendo en la economía internacional. Los miembros de APEC representan más de la mitad del PIB mundial y más de dos tercios de la población del planeta, y hoy explican dos tercios del comercio internacional de Chile.

Desde luego, ello se explica en medida crucial al extraordinario desarrollo de China en lo que va del siglo, hoy convertida en principal rival de Estados Unidos y, por cierto, en el primer socio comercial de Chile. Se entiende claramente la importancia que nuestra diplomacia le otorga a las relaciones con los países de esa zona.

De hecho, y paradojalmente, el Pacífico ha fortalecido las relaciones económicas de Chile con países de nuestra región que tienen costas en ese océano, como Perú, México y Colombia, los dos primeros miembros de APEC, y todos ellos integrantes de la Alianza para el Pacífico.

Por todo esto, la llamada “vocación Pacífica” representa una dimensión clave del interés nacional de Chile.

Lo más leído