Fuerte aumento de empleos públicos

Los últimos datos de desempleo correspondientes al trimestre agosto-octubre que fueron reportados ayer por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) han dejado nuevamente al descubierto la desproporcionada incidencia que están teniendo actividades relacionadas al sector público en la evolución de los ocupados en el país.

En efecto, de acuerdo con las estadísticas, en términos anuales el número de ocupados evidencia un aumento de 1,9%, variación que se explica en forma sustantiva por las actividades del sector salud (10,5%); la administración pública (10,4%) y enseñanza (7,7%), comportamientos que contrastan con lo que se observa a nivel de actividades del sector privado, en donde Minería, Industria Manufacturera y Construcción acusan retrocesos de 8%, 3,7% y 3,1%.

Otra fuerza motriz a nivel de empleo en el país fueron los trabajadores por cuenta propia, los que se incrementaron un 4,8% y que el grueso de los análisis asocia a empleos precarios, mal remunerados y, en no pocos casos, asociados a labores informales, incluso en situación de calle.

Respecto de esta fotografía del mercado del trabajo, resulta difícil decir que sorprende, ya que lo que confirman las cifras no es sino la consecuencia inevitable de un balance económico mediocre, en donde la actividad local está claramente por debajo de la que marcó la historia reciente del país hasta hace cuatro años y que se compara negativamente con otras naciones e incluso con el promedio mundial. El círculo vicioso de incertidumbre en las reglas del juego, promesas populistas imposibles de financiar y deterioro fiscal es una dinámica que exige ser detenida si es que se quiere honestamente retomar de verdad el camino al desarrollo.