Respiro para la economía en julio
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Un aumento de 3,3% registró el Índice de Producción Industrial (IPI) durante julio, comparado con igual mes de 2016, según comunicó ayer el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
La cifra, a la que se sumarán esta jornada y mañana otras relativas al mercado laboral y al comercio, representa el mayor avance en dos años y contrasta con la caída de 2,1% observada en junio.
Más importante aún, el repunte se sustentó en un generalizado incremento de los subsectores que componen la variable y que son minería, manufactura y electricidad, gas y agua.
Llamativo fue precisamente que la producción minera se expandiera 4,7% en el último año, despidiéndose de seis meses de contracción. La de cobre, en particular, mostró un incremento de 5,3% en el periodo.
Todos números que animaron las proyecciones de crecimiento del Indicador Mensual de Actividad Económica (Imacec) para el séptimo mes del año. De hecho, distintas entidades financieras mejoraron ayer en cierto grado las expectativas para el referido período. Aquellas más bajas tendieron a subir hasta las cercanías de 1,7% y las máximas se afianzaron sobre 2%.
De todas maneras, se trata de niveles pobres en un contexto más histórico para el país y que siguen reafirmando que este será el gobierno con peor registro promedio en términos de expansión del Producto Interno Bruto (PIB) desde los años ‘90.
El desafío, por ende, y cualquiera sea el signo de la próxima administración, será efectivamente dar con la fórmula para levantar la economía. Este reto será determinante para recuperar adicionalmente la capacidad de generar empleo.
