Internacional

“El Mercosur, Argentina y Venezuela son una apuesta perdedora”

Experto dice que hoy el bloque es, ante todo, una “alianza política con muchos aspectos negativos en la economía que no mejorarán”.

Por: Valor Económico, Brasil. | Publicado: Sábado 15 de junio de 2013 a las 05:00 hrs.
  • T+
  • T-

Compartir

Vender commodities a China y bienes manufacturados a Argentina y a Venezuela es una “apuesta perdida”, aseguró el economista uruguayo Arturo Porzecanski. Tal estrategia comercial, que el experto atribuye también a Brasil, es “inútil para un país que trate de entrar al primer mundo”, afirma.

Con décadas de experiencia en Wall Street, en 2005 dejó el mercado para dedicarse a la vida académica y hoy es director del Programa de Relaciones Internacionales de la American University en Washington.

- Usted dijo recientemente que Brasil es un rehén del Mercosur y define como políticas “suicidas” las adoptadas por Argentina en relación con la economía internacional. ¿Qué quiere decir?

- El Mercosur, Argentina y Venezuela son una apuesta perdedora. Si usted ve la historia, y se pregunta cuáles fueron los beneficios del Mercosur, es evidente que no sólo fue una pérdida de tiempo, un desvío de la atención para el comercio, sino también una pérdida de otras oportunidades.

- ¿Qué oportunidades?

-Si Brasil hiciese una alianza estratégica con Argentina, por un lado, pero al mismo tiempo otras con China, EEUU, Europa, entonces está bien. Usted puede tener una alianza inútil, pero al menos aprovecha las demás. Permanecer en este “barco hundido” sin negociar otras oportunidades para el siglo XXI es malo para el pueblo y para las empresas brasileñas. Por ejemplo: ¿por qué Brasil compra 90% de los autos exportados de Argentina? Porque nadie más les iría a comprar. Mercosur es hoy, ante todo, una alianza política con muchos aspectos negativos en la economía que no van a mejorar.

- ¿El Mercosur ya fracasó?

- Si el fracaso se mide como lo mediría un economista, sí. Pero si se trata de una alianza política, quién sabe si el Planalto lo entiende como un gran éxito. Supongo que no fue un éxito en todos los niveles. Esta actitud de solidaridad, de unión de los pueblos ... es una tontería. Los demás son simplemente nacionalistas si les conviene al propio bolsillo. De lo contrario, no lo son. Japón practica un nacionalismo inteligente, China también, los EEUU. El nacionalismo del Mercosur no es inteligente. No veo donde están los dólares. Esto es como una subvención brasileña a las malas políticas de los otros miembros del bloque.

-¿Sugiere un giro comercial a Brasil?
-Las oportunidades están en un 98% el el resto del mundo. Europa se está contrayendo ahora, pero volverá. Si Brasil quiere vender commodities a China y fabricar para Venezuela y Argentina, si ese es el modelo de desarrollo brasileño, ok. Pero no tiene mucho futuro. Ahora Brasil tiene una oportunidad única con la elección de Roberto Azevedo en la OMC.

- ¿Por qué?

- Si Brasil no cambia su política comercial para apoyar a Azevêdo en la ronda de negociaciones de la OMC a fin del año en Bali, Indonesia será terrible. ¿Por qué se votó por Azevêdo? Porque como Brasil siempre ha bloqueado los acuerdos de la Ronda de Doha se piensa: “Vamos a poner un brasileño, que sabe que puede obtener del palacio de Planalto un cambio de la política de comercio exterior de Brasil”.

- ¿Y ud. cree que es posible?

- Sí, sería una pena dejar a Azevêdo sin rumbo. Si Brasil no apoya la nueva ronda con un cambio de políticas y actitudes será una vergüenza. Nunca más se pondrá a un brasileño en nada.

- Ud. señaló en 2012 que la bonanza de los commodities fue fugaz y que los países deben prepararse para las “vacas flacas”. ¿Ya pasó la época de abundancia para la región?

- Aún tenemos un período de vacas gordas, pero no están engordando, sino adelgazando. Hay países que utilizan los ingresos extraordinarios para salvarse y otros para aumentar sus gastos. Es el caso de Uruguay y Brasil. Brasil nunca bajó su déficit fiscal, incluso en el mejor período, por lo tanto no tiene colchón. Hay países que son peores, como Venezuela y Argentina, que aumentaron el gasto más que sus ingresos. Ahora que las materias primas reducen su importancia, no tienen fondos.

Lo más leído