Columnistas

Liderazgo Inclusivo, el reto de diversidad en las organizaciones

Karina Cisterna, directora ejecutiva en AHA Inclusión, #SoyPromociona

Por: Karina Cisterna, directora ejecutiva en AHA Inclusión, #SoyPromociona | Publicado: Viernes 20 de noviembre de 2020 a las 14:45 hrs.
  • T+
  • T-

Compartir

Karina Cisterna, directora ejecutiva en AHA Inclusión, #SoyPromociona

Las elecciones 2020 en Estados Unidos dejó momentos históricos e interesantes de debatir, como Kamala Harris posicionada como la primera vicepresidenta mujer o la elección de Sarah McBride, la primera senadora trans.

Y es que diversidad es una temática transversal, que se toma las conversaciones en nuestro día a día: nos rodea y nos cautiva.

Organizaciones en Chile no se han quedado atrás en este debate. La diversidad y la inclusión han evidenciado la necesidad de plantear nuevas formas de cultura y espacios, desde la equidad.

¿Por qué hablar de diversidad e inclusión en las organizaciones? Ya sea por el cumplimiento de la legislación vigente, por los cambios en las exigencias sociales o porque nuestra sociedad es diversa, las empresas se siguen movilizando porque el caso de negocio de inclusión es positivo. Así, un estudio publicado recientemente por Harvard Business Review concluyó que equipos diversos tienen más de probabilidades de reportar un alto desempeño (+17%), tomar mejores decisiones (+20%) y hacer más colaboración (+29%).

De esta forma, las organizaciones buscan mejorar su desempeño mediante acciones orientadas a fortalecer una cultura diversa -y desde mi perspectiva como especialista en diversidad, equidad e inclusión, lo he evidenciado-, sin embargo, las brechas persisten: a pesar de los esfuerzos, las personas experimentan más frecuentemente discriminación en el lugar de trabajo (PNUD, 2017).

Entonces, ¿cuál es el desafío detrás de sostener una organización diversa e inclusiva?
Las empresas comenzaron estructurando políticas y procesos inclusivos. Dado ese paso, ahora el factor crítico de éxito es el ejercicio de liderazgo inclusivo, que moviliza y estimula relaciones basadas en el reconocimiento de nuestra identidad, instalando la gestión de equipos diversos.

Desde mi experiencia, algunas recomendaciones para habilitar nuestro liderazgo inclusivo son:
• Evaluar cuán diverso es nuestro equipo, identificando variables presentes como nacionalidad, género, discapacidad, etc. Entender estas diferencias y similitudes, nos permitirá conocer el valor que generan esos puntos de vista únicos.

• Crear un entorno de pertenencia y de respeto, donde todos y todas podamos mostrar quienes somos realmente, desde nuestra esencia.

• Comunicar efectivamente, evaluando que cada persona tiene una realidad distinta y que necesitamos ser activos/as en dar a conocer los compromisos de diversidad. Ejemplos son el uso adecuado del lenguaje y evitar bromas que perpetúan estereotipos culturales.

Para quienes estamos en posiciones de liderazgo, el mensaje es este: el liderazgo inclusivo impide que la diversidad e inclusión se detenga o ralentice, es el motor que permea los valores y los instala en conductas diarias. Comprender y abrazar las diferencias de nuestros equipos es el paso crítico para sostener la inclusión en las empresas.

Lo más leído