Nuevo proyecto de ley sobre migraciones
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La inmigración ha experimentado un crecimiento acelerado en los últimos años. El número de extranjeros se ha triplicado en la última década, alcanzando 2,7% de la población nacional en 2015. Se ha observado además un significativo cambio de composición de los migrantes, sumándose al ingreso de peruanos y argentinos, el de haitianos, colombianos, venezolanos y dominicanos.
La normativa vigente, sin duda, requería de una actualización para enfrentar de manera eficiente los desafíos que impone este fenómeno. El proyecto de ley del gobierno tiene este objetivo, aunque inexplicablemente dilató más de la cuenta su ingreso al Congreso.
Si bien se comparte el espíritu de contar con una normativa que permita una migración segura, ordenada y reglada, no es claro si el proyecto se orienta hacia una flexibilización estricta o si posibilita mayor control migratorio, puesto que tiene disposiciones en ambos sentidos. Una de las más llamativas es la creación de la categoría migratoria de visitante, que permite el ingreso a personas que busquen realizar una actividad económica hasta por dos años, lo que podría tener un impacto fiscal por mayores prestaciones estatales que no fueron contempladas en el Informe Financiero.
Además, se introduce el principio de no discriminación, pero se mantiene (aunque se eleva) un tope máximo de trabajadores extranjeros permitidos en las empresas. Tampoco se resuelven, por ejemplo, los obstáculos para la homologación de títulos.
Es claro que el tema amerita una discusión mucho más profunda, y es de esperar que ésta no se siga dilatando.
