Por un desarrollo humano

Padre Hugo Tagle

Los días 4 y 5 de noviembre se desarrollará la segunda versión del Congreso Social de la UC, bajo el lema "Por un desarrollo humano integral". Con este evento, se continúa la reflexión realizada hace dos años, que se enmarca dentro del espíritu que anima desde sus inicios a la UC cual es, ser canal de encuentro y generación de ideas para hacer de la sociedad un país más justo, integrado, solidario, desarrollado integralmente. Por ello, se tocarán en este congreso temas relativos a una mayor justicia, equidad, integración y comprensión mutua. Los problemas de desigualdad, pobreza extrema, desamparo y marginación atañen a todos los que vivimos en esta "copia feliz del Edén". Aspiramos a ser "una mesa para todos", en que todos la sientan y vivan así. No basta con un equilibrio en las cifras. Es necesario aspirar a que "cada chileno logre un desarrollo humano integral", dentro de una sociedad que tienda a esa mayor integración y crear así las condiciones para que nadie se sienta excluido. Todos ganamos.
Será espacio de reflexión y lectura crítica tanto de los logros alcanzados en materia social como de lo que nos impide avanzar como país en la atención de toda persona y sus relaciones con los demás y su entorno. El mejor discurso en materia de políticas públicas es el ejemplo de actores sociales que motiven a otros a un humanismo integral y solidario.
Las distintas disciplinas se encontrarán en el debate de ideas para avanzar en la visión multidisciplinaria de lo social. La preocupación por el mejor nivel de vida no es exclusiva de una sola. Por ello, se incorpora la innovación como elemento fundamental para este análisis. Si se hace siempre lo mismo, difícil obtener resultados diferentes. Urge la presentación de nuevos puntos de vista que enriquezcan el debate en torno a lo social, para cruzar de una vez por todas el umbral al desarrollo, de forma integral.
Nos dice el Papa Francisco en su exhortación apostólica Evangelii Gaudium: "Amamos este magnífico planeta donde Dios nos ha puesto, y amamos a la humanidad que lo habita [...] La tierra es nuestra casa común y todos somos hermanos. Si bien 'el orden justo de la sociedad y del Estado es una tarea principal de la política', la Iglesia 'no puede ni debe quedarse al margen en la lucha por la justicia'" (EG 183).
La labor de la Universidad no es solo transmitir conocimientos sino ser espacio, ágora, plaza de encuentro y reflexión, creación e innovación para hacer de nuevas propuestas una real contribución al bien común y así alcanzar una sociedad más justa y solidaria.