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El rol de la empresa chilena en un nuevo escenario

Un Nuevo Equilibrio es una plataforma conformada por un grupo de 19 directores y fundadores de compañías, que buscan ser un aporte al país en áreas como la reactivación económica y la sustentabilidad.

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Cuidemos el medio ambiente

Por: Isabel Ramos Jeldres | Publicado: Lunes 23 de noviembre de 2020 a las 04:00 hrs.
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El año pasado en Estados Unidos y Europa cobró fuerza un movimiento que cuestionaba el rol de las empresas en la sociedad. No era externo, sino interno, y llevó a que organizaciones como la Business Rountable de EEUU y Davos declararan abiertamente que su nueva misión ya no es maximizar las ganancias de los accionistas, sino responder a sus clientes, trabajadores y a la comunidad.

De forma paralela, el estallido social de octubre 2019 aumentó la presión para exigir un mayor compromiso social por parte de las compañías nacionales. Y varias se hicieron cargo.

Así nació Un Nuevo Equilibrio, una plataforma conformada por un grupo de 19 directores y fundadores de compañías, que convoca a empresarios y emprendedores a asumir un rol activo en el proceso político, económico y social que vive el país.

"Decidimos que teníamos que evidenciar que todos quienes lideramos una empresa estamos comprometidos, involucrados y queremos contribuir a abordar los desafíos que tenemos como país. Un Nuevo Equilibrio es el lugar donde empresarios y emprendedores pueden ser parte de una plataforma que nos permita articular nuestro aporte en tres áreas: País, Reactivación Económica y Sostenibilidad", explican.

El grupo está integrado, entre otros, por Andrés Meirovich (fundador y presidente de Genesis Ventures), Arístides Benavente (presidente de Komax), Bernardo Larraín (director de Colbún), Carmen Assadi (directora del G100, ex directora de Asech y socia fundadora de e-press), Christoph Schiess (presidente de Tánica) y Daniela Lorca (fundadora de Babytuto).

"El Banco Mundial advertía a principios de año (preCovid) que el pronóstico de crecimiento global podía mejorar, siempre y cuando se redujeran las tensiones asociadas a la incertidumbre política y la constante desconfianza social en las instituciones. En Chile a partir del estallido social, la ciudadanía puso en duda a todas las instituciones y también a los empresarios. Y nosotros, desde ese rol, creemos fundamental aportar con todo lo necesario para poder reestablecer las confianzas y, con eso, el diálogo, para lograr acuerdos que nos permitan co-construir un proyecto país transversal", aseguran.

Las demandas ciudadanas le pusieron rostro a una desigualdad de la que ya daban cuenta los organismos internacionales. "Estamos conscientes de que el crecimiento y avance que ha tenido Chile en los últimos 30 años han traído consigo un aumento en las expectativas y una desigualdad que como país tenemos la responsabilidad de corregir. Somos un país más pobre que el año pasado, por lo que tenemos que contribuir a aplanar la brecha y permitir que todos despeguemos desde una cancha pareja y con igualdad de oportunidades", dicen.

La pandemia, en tanto, aceleró la decisión de asumir un rol social más activo. Según el grupo, "son estos períodos de cambios profundos los que traen la mayor oportunidad de cambio y progreso en la historia de la humanidad".

¿Y las malas prácticas?

Para Un Nuevo Equilibrio, visibilizar las buenas iniciativas y prácticas es fundamental para evidenciar "cómo la labor empresarial aporta a un Chile más inclusivo y con igualdad de oportunidades, mediante un actuar corporativo responsable que aporta a la comunidad, colaboradores, clientes, medioambiente y al progreso de nuestro país".

Ese será el foco de trabajo del área de sostenibilidad, que se encargará de consolidar propuestas y visiones sobre buena gobernanza, medioambiente y economía circular.

A pesar de que quieren ser una vitrina de buenas iniciativas, se hacen cargo de que las malas prácticas, como los casos de colusión, los han expuesto a las críticas. "Somos conscientes de que hay malos ejemplos de empresas o empresarios que no han actuado en pos del bien común, y que estos casos han tenido importante repercusión pública. Por eso tenemos un deber con todos aquellos emprendedores y empresarios que están haciendo las cosas bien, dando tribuna a quienes han enfrentado positivamente este desafío y han agregado valor a sus colaboradores y al país", afirman.

El escrutinio es mucho más rápido, y público, con las redes sociales. "Estamos viviendo la transformación digital forzosa y existen plataformas que democratizaron la rendición de cuentas que exige la ciudadanía cuando considera que existen promesas incumplidas de todo tipo", reconocen.

Pero las redes también presentan una oportunidad para una plataforma como esta. "En un escenario donde las fake news toman fuerza, las redes sociales nos entregan la oportunidad de informar rápidamente a la ciudadanía, pero también dar tribuna a miles de buenas experiencias".