Una ecléctica comitiva acompañó a la presidenta Michelle Bachelet a su cita mundialera en Brasil. Además de la inclusión de niños afectados por el terremoto y el incendio de Valparaíso, la jefa de Estado invitó a participar de su periplo a representantes del mundo empresarial, entre los que destacan el presidente de la Sofofa, Hermann von Mühlenbrock, el presidente de la embotelladora Andina, Juan Claro, y el secretario general de la CMPC y líder del Consejo Empresarial Chile-Brasil, Gonzalo García.
El contexto en que se produce este viaje está marcado por el intenso debate que ha provocado la reforma tributaria y los reparos que han surgido desde diversos flancos, entre ellos del empresariado, sobre los efectos que podría llegar a tener el cambio impositivo en la productividad y en el desarrollo del país. Pese a ello, la jefa de Estado se encargó de aclarar en Brasilia, que no existen malas relaciones, aludiendo a que es una situación absolutamente normal la inclusión de empresarios en sus diversos viajes: “creemos que tenemos una relación normal con los empresarios de nuestro país y hemos trabajado incluso para que el país siga creciendo, desarrollándose, y hemos lanzado dos agendas que estoy convencida los empresarios ven con extraordinario interés”, expresó Bachelet. Y agregó que los dos elementos con los cuales se debe trabajar en conjunto son la agenda energética y de productividad anunciada hace algunas semanas por La Moneda.
Desde la otra vereda, von Mühlenbrock -uno de los más duros frente a la reforma tributaria- destacó las buenas relaciones que existen con la actual administración de gobierno y que se debe avanzar en una integración más amplia entre los países de la región: “Nunca hemos tenido problemas y como hemos dicho siempre, nosotros queremos que a la presidenta le vaya muy bien y al gobierno, porque si les va bien, les va bien a todos los chilenos”. Destacó que en esta visita al país carioca se espera poder fortalecer los lazos empresariales entre ambas naciones.
Bilateral con Rousseff
La presidenta sotuvo un encuentro oficial con su par brasileña, Dilma Rousseff, en la cual firmaron acuerdos en materias económicas y de derechos humanos.
Bachelet destacó, como ha sido el tenor de su política internacional desde que asumió, la importancia que puede jugar nuestro país como un puente entre el Atlántico y el Pacífico, cuestión que volvió a resaltar tal como lo hizo en su primer viaje a Argentina. “Hemos hablado también de la relación que Chile quiere entender en el rol que vamos a jugar en la Alianza del Pacífico y cómo vemos una enorme posibilidad de cooperación con los países del Atlántico, con Mercosur, cuestión que a la presidenta le ha parecido extraordinariamente positivo”.
La presidenta aclaró que no se tocó el tema de la demanda marítima boliviana , por ser un tema bilateral. Sí, señaló que aún se encuentra en estudio cualquier decisión sobre impugnar a la corte, que en su momento se informará.
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