Por C.A.S.
El precandidato de los denominados “príncipes” de la DC, Claudio Orrego, diseñó una estrategia de campaña centrada en devolverles la mística a la militancia de base de La Falange con miras a ganar la primaria del 20 de enero, donde competirá con la senadora Ximena Rincón.
Esta semana, el alcalde saliente de la comuna de Peñalolén, se ha dado el trabajo de llamar por teléfono a todos los alcaldes electos y no electos de la Democracia Cristiana para pedirles su apoyo en la próxima primaria.
A estos les envió -durante la campaña municipal- mensajes radiales y gigantografías con su foto, por lo que espera “ahora reciprocidad”, comentan sus cercanos.
En el marco territorial, también ha estado en contacto con los dirigentes de base de la colectividad.
En paralelo, y desde hace 8 meses, que están trabajando las comisiones técnicas que le darán sustento a su programa de gobierno: Comisión económica; de Salud; Vivienda, Educación.
En ese contexto, se están rearmando además los equipos de “voluntariado” de profesionales jóvenes. Se agregó que serían entre 300 y 500 “los voluntarios por Orrego”.
Se espera que la Junta Nacional convocada para el 17 de enero ratifique la fecha de las primarias para el 20 de ese mismo mes.
Trascendió que a diferencia de Ximena Rincón, el alcalde de Peñalolén marcará “profundas” distancias en lo valórico con lo que piensan quienes apoyan la candidatura de la secretaria adjunta ONU-Mujeres, Michelle Bachelet, e intentarán “seducir el voto de la centroderecha”.
Además, marcarán “una distancia moderada” con el Partido Comunista a quien exigirán un compromiso mayor con la democracia y una condena más radical al gobierno de Cuba.
Los pilares de la estrategia y diseño territorial de Orrego son el ex ministro Sergio Espejo y el ex subsecretario y analista político, Jorge Navarrete.
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