CONSUMO CONTINUARÁ "CAUTELOSO"
La Cámara de Comercio de Santiago (CCS) recortó sus proyecciones para el crecimiento de la economía local el próximo año a 3,1%. ¿La razón? No ve en el horizonte catalizadores "contundentes" que permitan ser más optimistas en los próximos trimestres. "No se puede obviar que el espacio para acelerar el consumo privado está delimitado por el cambio en el marco regulatorio que afecta la creación de empleo y un gasto público que el próximo año no tendrá las mismas holguras que en 2015", explica el gerente de Estudios de la CCS, George Lever.
Otro punto que no le hace prever un panorama más optimista es que estima que la inversión seguirá anclada a un cuadro de expectativas "aún muy incierto". En cuanto a las ventas del comercio, proyecta que tendrán un aumento levemente superior al 2,4% proyectado para este año, con un rango entre 2,5% y 3%, en línea con un consumo que mantendrá una trayectoria "cautelosa". Los productos con mejores perspectivas son vestuario y calzado y de tecnologías móviles. Como explica Lever, el gasto de los hogares se verá tensionado por los efectos globales del alza de la tasa de interés en Estados Unidos y una mayor apreciación del tipo de cambio, mientras que la oferta de crédito mantendrá una posición conservadora.
MINERÍA: ESTABILIDAD DE REGLAS SERÁ CRUCIAL
El gerente de Estudios de la Sociedad Nacional de Minería (Sonami), Álvaro Merino, estima que la actividad crecerá alrededor de 3% en 2016. "Dicho incremento será levemente mayor al que observaremos durante este año, no obstante, consideramos que este es un desempeño modesto para nuestra economía, para lo que Chile requiere", complementa el experto. Para Merino es de vital importancia dar un impulso robusto a la inversión, que ha caído durante los últimos seis trimestres a raíz de un deterioro en las expectativas. Bajo su perspectiva, dado el escenario es tarea fundamental explicitar a los agentes económicos, en forma clara y nítida, la ruta a seguir en el mediano plazo, lo cual generará una mayor grado de confianza respecto del futuro.
"Adicionalmente, para incrementar la inversión, como país requerimos acuerdos amplios en un horizonte de largo plazo, donde la estabilidad de reglas es un factor crucial", plantea Merino. Para el sector minero, en particular, la Sonami espera un crecimiento en torno al 2%, con una producción de cobre (el principal producto dentro de la canasta) cercana a 6.100.000 millones de toneladas y exportaciones mineras por unos US$ 40.000 millones.
UN NUEVO AÑO DIFÍCIL PARA LA INDUSTRIA
"La actividad de 2016 está condicionada a que el clima de incertidumnbre interno se desvanezca, lo que hasta ahora no ha ocurrido", expone el presidente de la Sociedad de Fomento Fabril, Hermann von Mühlenbrock. Para el líder gremial, la discusión de las reformas -en particular la laboral- ha originado altos niveles de incertidumbre en el mundo empresarial y, por ende, una baja disposición a invertir, lo que no mejoraría en 2016. Además, cree que el consumo seguirá contenido por el menor crecimiento del empleo y las remuneraciones, mientras que el panorama externo no presentará grandes cambios, por lo que estima un PIB en torno a 3% para 2016.
Para el sector industrial prevé un crecimiento entre 1% y 2%, algo por encima de lo proyectado para 2015 (1%). Recuerda que el rubro ha venido enfrentando un difícil escenario en los últimos años, el cual se ha visto intensificado por el menor crecimiento y recientemente por las reformas en curso, lo que tiene actualmente el número de proyectos en carpeta del sector en mínimos históricos. ¿Qué podría impulsar al rubro? Que los sectores transables retomen el ritmo de crecimiento de comienzos de 2015; el sector exportador, dado el favorable tipo de cambio; y el mayor dinamismo esperado para nuestro principal socio comercial, EEUU.
MENOR GASTO PÚBLICO AFECTARÁ CONSTRUCCIÓN
Al hablar del crecimiento de la actividad local para el próximo año, el gerente de Estudios de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), Javier Hurtado, cree que la proyección de 3,4% que arrojó la Encuesta de Expectativas Económicas (EEE) de junio es algo prematura. "Yo soy un poco más pesimista", plantea, primero, porque no ve un repunte en la inversión privada tomando en cuenta el terreno negativo en el que se encuentran las expectativas. "El tema de fondo es interno. Y si bien hemos visto un ministro de Hacienda bastante más fuerte respecto a su preocupación por el crecimiento, no sé si es suficiente con ese mensaje. Porque nos dicen que va a existir un foco en el crecimiento pero el programa de gobierno sigue y es justamente lo que causa incertidumbre", expone. Su rubro en particular, añade, enfrentará un problema adicional: la disminución de la inversión pública en línea con el menor gasto fiscal anunciado a contar de 2016. Así, en un cuadro pesimista, sin cambios en las expectativas, anticipa un crecimiento del sector menor al 1%, que de existir mejoras podría subir a un 2,5%. El subsector de viviendas seguirá liderando las alzas, aunque como Hurtado recuerda, representa sólo 30% del rubro.
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