Corea del Norte desafió una vez más a Estados Unidos y a sus aliados con el lanzamiento de un misil balístico de corto alcance que cayó cerca de Japón, en lo que sería el último de una serie de ensayos que han elevado las tensiones a nivel mundial y activado las alarmas para posibles sanciones.
Tras ser informado de las actividades, el presidente Donald Trump criticó a Pyonyang al tiempo que destacó el papel que ha desempeñado China en su intento por disuadir a sus vecinos de detener las pruebas.
“Corea del Norte ha mostrado una gran falta de respeto hacia su vecino, China, al disparar otro misil balístico pero China se está esforzando”, escribió el titular de la Casa Blanca en Twitter.
Beijing, en tanto, reiteró que las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU tienen “normas claras” sobre las actividades de los misiles norcoreanos e instó a la nación a no contradecirlas, mientras que Rusia condenó la acción y también pidió moderación.
El lanzamiento se produce tras dos exitosas pruebas de misiles de alcance mediano y largo llevadas a cabo por el mismo país en las últimas tres semanas, un ritmo sin precedentes en el marco de los esfuerzos norcoreanos para desarrollar un proyectil balístico intercontinental capaz de llegar a territorio estadounidense.
Las actividades han elevado las tensiones en la región especialmente con Corea del Sur que estrenó nuevo presidente el 10 de mayo con un llamado al diálogo con el país vecino. El nuevo mandatario Moon Jae-in ha asegurado que las sanciones no han conseguido acabar con la creciente amenaza nuclear y el programa de misiles de Pyongyang.
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