Por Anna Fifield
Tampa, Florida
Mitt Romney ha asegurado que impondrá el orden corporativo a la Casa Blanca de ser elegido presidente en noviembre. Se muestra como un experimentado gerente, mientras se prepara para aceptar esta semana oficialmente la nominación del partido para la presidencia.
En una campaña centrada en la debilitada economía de EEUU, el equipo de Romney usará la convención nacional republicana en Florida para mostrar al ex ejecutivo de capital privado como un artista de las reestructuraciones altamente calificado, mientras los sondeos muestran que sigue en un empate estadístico con Barack Obama.
En una entrevista en vísperas de la convención, Romney anunció que seguirá su enfoque empresarial de ser elegido. Declaró que su gabinete estará dominado por hombres de negocios, y destacó a Meg Whitman, CEO de Hewlett-Packard y ex candidata republicana a la gobernación de California, como el tipo de líder empresarial del cual le gustaría rodearse. También mencionó a Debra Lee, la CEO de Black Entertainment Television, aunque sólo pudo recordar su cargo, no su nombre. “Una gerenta eficiente según todos los reportes”, explicó.
“Suelo reunirme con gente que tiene responsabilidades en algún tipo de empresa para establecer metas y objetivos muy claros, y que sepan lo que deben cumplir”, dijo Romney al sitio web Politico. Añadió que hará una lista de control para sus primeros 100 días, tratará a su gabinete como una junta de directores y enfocará su cargo como un CEO.
“No me gusta que me presenten una solución para que la apruebe”, indicó. “En vez de eso, prefiero sumergirme en el tema y escuchar puntos de vista alternativos y ser capaz de tomar una decisión”.
El candidato, cuya fortuna se calcula en US$ 250 millones, ha dicho que su trabajo en Bain Capital demuestra que sabe cómo dirigir una firma eficiente y rentable.
Los seguidores de Obama han intentado mostrar a Romney como un capitalista y mostrado avisos en que se ve a empleados que perdieron sus empleos en fábricas compradas por Bain. Por su parte, el equipo republicano intentará tomar el control de la narrativa la noche del jueves y destacar el éxito de Romney.
Tom Stemberg, fundador de Staples, una cadena de papelerías iniciada por Romney, y Bob White, un jefe de Bain que actualmente es presidente de la campaña, hablarán antes que Romney acepte oficialmente la nominación.
Kerry Healey, la vice de Romney cuando fue gobernador de Massachusetts, también hablará sobre su mandato estatal.
“Digamos la verdad. Podemos hacerlo en esta convención”, señaló según informes de prensa Healey a miembros de la delegación de Massachusetts para la convención, en referencia a los avisos de Obama.
Su campaña también intentará lidiar con la percepción de que es distante y reservado, con un discurso de su hijo Craig y su esposa Ann. Grant Bennett, líder de la Iglesia de los Santos de los Últimos Días, hablará sobre la fe mormona de Romney. Romney ha estado sistemáticamente detrás de Obama en los sondeos, pero ha restado importancia a su bajo favoritismo al decir que un “buen tipo” no es necesariamente el mejor presidente.
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