Cruz Blanca se adelanta a cambios regulatorios al sistema de salud

Por Costanza Cristino



Luego de su ingreso a la bolsa en 2011, Cruz Blanca Salud no se ha quedado quieta. En 2012 aterrizó en Perú, anunció la construcción de su primera clínica en Santiago y un plan de inversión de US$ 250 millones para un periodo de tres años. Y este 2013 parece comenzar en la misma línea, luego de que el miércoles el holding informara a la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS) su ingreso al mercado asegurador, con la creación de una compañía de seguros de vida.

La apuesta de la compañía controlada por el Grupo Said hace sentido entre los analistas, quienes proyectan que mediante este vehículo el holding potenciará su negocio asegurador, hoy en manos de la Isapre Cruz Blanca.

De acuerdo a Vicente Meschi, analista de Corp Research, “lo que está haciendo Cruz Blanca es tratar de entregar todos los productos que están en el área de la salud, por lo que la idea es no sólo vender el plan de la Isapre, sino también los planes complementarios de salud. Gran parte de eso apunta a poder tener un mejor control de los costos”.

Por esto es que en el mercado el movimiento del holding es visto como coherente y se concluye que el foco de la nueva empresa del holding estará en los seguros complementarios de salud, un producto que además se ha masificado de forma importante en el último tiempo.

Según cifras de la Asociación de Aseguradores de Chile (Aach) hoy más de 4,6 millones de personas están aseguradas por este tipo de instrumentos, ya sea en modalidad individual o colectiva. Cifra que no sólo es llamativa porque hace diez años los usuarios de estos seguros no superaba el millón de personas, sino además porque también supera el número de beneficiarios del sistema de Isapres, los que bordean los 3 millones de personas.

Por otro lado “hay una cantidad importante de gente que se está moviendo desde Fonasa al sistema privado, las personas que han encontrado un empleo después de mucho tiempo y las que ha visto un aumento en su salario, están prefiriendo cambiarse a una Isapre”, dice Meschi. Mercado que también puede ser abordado por la nueva aseguradora.




Cambios regulatorios


A esto se suma un elemento crucial que podría estar afectando la decisión de Cruz Blanca Salud: los cambios regulatorios que se están discutiendo para el sistema de salud privado. De acuerdo con Rodrigo Jacob, gerente de estudios de BICE Inversiones, “sí se podría decir que la empresa se está anteponiendo a los cambios regulatorios que puedan haber en el sector. Es una alternativa que permite diversificar su negocio”.

Y pareciera que Cruz Blanca reaccionó en el minuto preciso, considerando que los fallos anunciados por la Corte Suprema esta semana en contra de las alzas en los planes de las Isapres deberían apurar las reformas al sistema. De hecho la Cámara Baja seguirá el próximo martes discutiendo en sala el proyecto que cambia la Ley de Isapres, mientras el Gobierno quiere aprovechar este escenario para lograr un despacho de la iniciativa.