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1° de Mayo: buen trabajo

María Isabel Vial Presidente Ejecutiva Fundación Carlos Vial Espantoso

Por: María Isabel Vial | Publicado: Martes 30 de abril de 2019 a las 04:00 hrs.
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María Isabel Vial

Mañana se conmemora el Día Internacional del Trabajo. Más de un siglo y medio ha pasado desde la primera revolución industrial y desde entonces hemos evolucionado como empresa y como sociedad hacia nuevas formas de organizarnos. La Fundación Carlos Vial Espantoso lleva 20 años trabajando en la construcción de relaciones laborales justas y colaborativas. En este tiempo, hemos sido parte del avance del mercado laboral y creemos que cuatro ejes, que inspiraron el pensamiento de nuestro fundador, pueden iluminar la discusión sobre qué constituye un buen trabajo.

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“La garantía y el respeto de la dignidad del trabajador”, hace alusión al aseguramiento de sus derechos fundamentales. En esta materia ha habido un importante avance para todos los trabajadores dependientes. Sin embargo en los últimos 10 años el auge de los informales y trabajadores de plataformas, amenaza la seguridad en el trabajo. Guy Standing los ha catalogado como “el precariado”, priman salarios bajos y la incertidumbre sobre temas, como las vacaciones, los límites a la jornada laboral, el tiempo propio y la esperanza de una vida mejor.

“El desarrollo pleno de los trabajadores”, implica la construcción de organizaciones que permitan su autorrealización y reconocimiento, donde se valore su aporte. Frederic Laloux plantea la evolución de las empresas, desde estructuras más primitivas y jerárquicas, hacia las orientadas al valor compartido, logrando encontrar cada vez, modelos radicalmente más productivos que el anterior. Hemos logrado avances importantes en función del desarrollo de carrera y de incentivos, sin embargo, hoy nos enfrentamos a un nuevo paradigma caracterizado por la autogestión, la plenitud y la búsqueda del propósito. Los ambientes de confianza y de sentido posibilitan organizaciones más sanas.

“La participación de los resultados económicos de la empresa” hace referencia a la búsqueda de fórmulas de compensación justas, que reconozcan el aporte de cada persona en la generación de utilidades y consecuentemente, en el éxito de las empresas. Los sistemas de compensaciones diseñados con el trabajador son grandes avances, no obstante el desafío de acercar las brechas salariales persiste. Chile es uno de los países más desiguales en relación a las remuneraciones. ¿Es posible estudiar fórmulas para compartir las utilidades? ¿Qué pasaría si las economías de plataforma fuesen de los mismos trabajadores?

“La participación en la toma de decisiones” implica que los trabajadores tengan una voz en las decisiones que los afectan y requiere poner la voluntad al servicio del bienestar colectivo, desde los trabajadores y dirigentes sindicales y desde la administración. Hemos avanzado en los mecanismos para negociar y llegar a acuerdos, en transparencia y acceso a información. Tenemos la oportunidad de construir organizaciones más horizontales y co-gestionadas en la empresa. El acceso a la formación de calidad que permita nuevas miradas desde los trabajadores, puede ser un punto de partida.

Como sociedad, tenemos la oportunidad de hacer emerger una nueva forma de hacer empresa y reconfigurar el mercado laboral. Si somos capaces de usar la tecnología para ganar productividad y libertad, si somos parte activa de la construcción de organizaciones más sostenibles, podremos sacar el mejor partido de las condiciones de nuestros tiempos. Dependerá de nuestro nivel de conciencia y de nuestro nivel de empatía elevar los estándares que hemos construido para celebrar cada avance que logremos juntos.

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