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27-F: lo que no podemos olvidar

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Dos reconocidos expertos estadounidenses en riesgos viajaron a nuestro país para conocer detalles de nuestro plan de reconstrucción. En un seminario organizado por Icare destacaron lo positivo que han sido las medidas adoptadas por el gobierno. En ese contexto, resalta la gran capacidad que tenemos los chilenos de salir adelante ante las mayores de las dificultades. En diferentes ocasiones nuestro país ha sufrido fuertes catástrofes, la última, el terremoto del 27 de febrero de 2010, el cual afectó al 75% de la población y dejó una importante destrucción en nuestro territorio.



Y así como los chilenos tenemos el atributo de superar la adversidad, también solemos olvidar. Es así como muchos hoy no recuerdan que vivimos el sexto peor terremoto de la historia y las imágenes que recorrieron el mundo tras el 27-F, de ciudades completas destruidas.

La reconstrucción parecía una tarea imposible: más de 50 ciudades resultaron afectadas, más de 200 mil viviendas fueron destruidas o seriamente dañadas y las pérdidas fueron estimadas en US$ 30 mil millones, lo que corresponde al 18% del PIB de Chile.

A pesar del nivel de destrucción, el presidente Sebastián Piñera se autoimpuso la meta de reconstruir el país en los cuatro años de su gobierno. Hoy con orgullo podemos decir que el proceso de reconstrucción ya ha avanzado en más de 80%. Esto quizás ha influido en el olvido, ya que nos encontramos con un país que, a pesar de estas dificultades, está nuevamente en marcha, con un crecimiento promedio de 6% y una fuerte creación de empleo.

El año 2010 se caracterizó por la recuperación de prácticamente 100% de la conectividad del país, dejando operativos casi 2.500 puntos dañados en carreteras, aeropuertos y puertos, entre otros. El 2011 fue el año de la Salud, con la recuperación de todas las camas dañadas, se completaron las reparaciones en decenas de hospitales y se inauguraron nueve hospitales de construcción acelerada. Este año ha estado marcado por importantes avances en el objetivo de entregar hacia 2014, 222 mil viviendas o reparaciones que han beneficiado a 890 mil personas.

Sin embargo, no podemos centrarnos sólo en el trabajo de recuperación, también debemos adoptar medidas de prevención. La importancia de este elemento quedó demostrado el 27-F, donde muchas de las 551 personas que fallecieron lo hicieron por la falta de medidas de prevención. Por eso estamos trabajando para crear una nueva institucionalidad para enfrentar las catástrofes, el Sistema Nacional de Emergencia y Protección Civil y la Agencia Nacional de Protección Civil. También estamos estableciendo protocolos de acción frente a desastres, mejores telecomunicaciones y monitoreo a través de una Red de Comunicaciones de Emergencia y estamos incrementando y mejorando las instalaciones de medición.

Hemos alcanzado importantes avances en la reconstrucción. Sin embargo, sabemos que aún queda mucho por hacer y por eso estamos trabajando intensamente para cumplir con nuestro compromiso de terminar el proceso en 2014. Cuando asumió este gobierno, recibimos un país devastado por el terremoto. En un año y medio más, entregaremos un país pujante que mira con certeza hacia el desarrollo.

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