Una oportunidad de inversión en plena cuenca del lago ranco

Un lugar para vivir rodeado de naturaleza, paisajes de ensueño, libertad y privacidad son algunos de los atributos de Fundo Leona, un proyecto inmobiliario de 1.400 hectáreas en plena cuenca del Lago Ranco, a 3,5 km de Futrono.

“No es un proyecto inmobiliario común”. Así lo describe Egon Simon, gestor de territorio y socio de la inmobiliaria Tierra Fértil, a cargo del desarrollo de lo que también define como un nuevo modelo de habitar, en el que han trabajado durante los últimos seis años.

“No se pensó en la maximización del terreno y se decidió hacer macro lotes para evitar la alta densidad habitual de proyectos similares”, detalla el ejecutivo.

Según Simon, todo fue pensado y diseñado para mantener el concepto de fundo, destacar la fisonomía del paisaje y adaptarse a la geografía y a la propia naturaleza.

“Ubicamos los terrenos de manera que cada propietario se sintiera siempre en un fundo con senderos para recorrerlo casi en su totalidad y dejar un enorme parque y un sector de huerta para que la comunidad disfrute”, señala. Por esa razón puede ser recorrido completamente por el bosque, o también orillando el estero que nace en su propio parque, de 1.185 hectáreas. 

En este inmenso espacio natural solo existen 55 terrenos o refugios. “Eso lo convierte en un lugar silencioso, seguro, tranquilo y con un especial sentido de la privacidad e intimidad”, destaca el ejecutivo sobre las características que a sus ojos hacen atractiva la idea de invertir en el desarrollo de un espacio habitacional en este lugar del sur de Chile, donde promueven un ecosistema saludable desde el momento del diseño del proyecto: “Respetamos empastadas naturales y corredores biológicos. El paisajismo es el entorno, el que intervenimos lo menos posible”, añade.

Así han logrado restaurar 75 hectáreas con bosque nativo, hoy hábitat de muchas especies. Esa es otra de las razones por las que lo destaca como un proyecto de vida: “Invertir en un bosque nativo ayuda a mantener el equilibrio del entorno, a favorecer la llegada de aves y otros seres vivos”.

-¿Cuál es el perfil del inversionista interesado en un proyecto como este? ¿Es gente que busca una segunda vivienda o gente que está cansada de la ciudad y quiere cambiar de vida?

-Su ubicación estratégica, tan cercana a Futrono y a solo una hora de Valdivia y al aeropuerto lo hace un lugar para vivir o para disfrutar largas temporadas. Quienes han invertido acá lo han hecho pensando en un proyecto de vida. Algunos han invertido y han comenzado a vivir de forma inmediata al construir su casa. Otros habitan sus viviendas por períodos del año con planes futuros de vivir permanentemente.

Hay varias familias que viven en Fundo Leona, que materializaron un sueño en medio de naturaleza, vistas, bosques, río y un lago que siempre cautiva. Parte del diario vivir incluye hacer trekking, descensos en bicicletas y avistamiento de aves.

-¿En qué etapa está hoy el proyecto? ¿Cuántas casas están construidas y habitadas?

-El proyecto ya está finalizado y solo quedan 11 refugios en venta de un total de 55 unidades, entre 2 y 5 hectáreas. Contamos con una constructora integrada al proyecto, para quienes decidan construir. Nos hacemos cargo de principio a fin. Dentro de Leona hemos construido 18 casas y tenemos cuatro en ejecución, incluidas las de los gestores del proyecto, que decidieron compartir este fundo familiar.

-En general, ¿cómo evalúa las oportunidades que ofrece el mercado inmobiliario en el sur?

-El sur del país siempre ha sido parte del imaginario colectivo. Limpio, sano, familiar y con un estilo de vida tan especial que fue el lugar elegido desde siempre para las vacaciones.

Hoy esa mirada ha cambiado y se ha perfilado como un lugar para vivir, por la calidad de vida que ofrece, con altos grados de seguridad, confort y por el entorno privilegiado.

La zona tiene mucho potencial y queremos impulsarlo con el financiamiento directo a cuatro años, con un pie de 30% para quienes decidan sumarse a una comunidad consolidada en un entorno privilegiado del bosque valdiviano. 

ventana a la naturaleza

En la parte alta del proyecto se encuentra el Parque Cordillera. Esta bio-reserva cuenta con más de 1.185 hectáreas con acceso directo a bosques, quebradas, afluentes y a una laguna cercana a los 1.200 msnm, a la que se puede llegar recorriendo libremente preciosos senderos.

A diez minutos, por la ruta a Llifén, se encuentra el Refugio Lago. Esta propiedad es de uso común de los propietarios y permite un cómodo acceso al lago en un sector a orillas del Río Quimán. La playa tiene muelle y botadero de lanchas, y también un amplio lugar de estacionamiento.

Además, Fundo Leona está ubicado muy cerca de la ruta de los siete lagos: Pellaifa, Calafquén, Pullinque, Pirihueico, Neltume, Panguipulli y Riñihue. Todos con hermosos paisajes por descubrir.

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