Desde agosto del año pasado que Fernando Barraza se desempeña como director del Servicio de Impuestos Internos (SII). Y si bien reconoce que arribó al piso 6 de Teatinos 120 “en uno de los momentos más complejos” en la historia del organismo, en medio de los cuestionamientos -internos y externos- por el rol del servicio en los bullados casos de platas políticas, recalca que ha trabajado “tranquilo” y que no ha sido “tan duro” como esperaba.
¿Cómo se logra aquello en un organismo que siempre está en la lupa como el SII? La tesis de este ingeniero es que los actores políticos han entendido que el rol de la institución no es perseguir el financiamiento ilegal de las campañas, sino lograr el cumplimiento tributario de los contribuyentes.
“Hemos logrado recomponer en los funcionarios el orgullo y la motivación de trabajar en Impuestos Internos, y se ha recuperado el sentido de nuestra labor: asegurar el cumplimiento tributario para contar con los recursos que el país requiere para su desarrollo”, señala el director Barraza.
- También ha habido duras críticas al servicio.
- La opinión pública empieza a entender cuál es el verdadero rol y el trabajo de Impuestos Internos. Nuestra labor es bien clara y lo he dicho desde el primer día. Creo que la opinión pública ha ido entendiéndolo.
- ¿Incluye ahí a los políticos y a los fiscales?
- Por supuesto, a todos. Los distintos mundos han entendido eso. Yo en realidad trabajo muy tranquilo. Desde que asumí y hasta el día de hoy, nadie me llama por situaciones de ningún tipo, ni de querellas ni tampoco por cuestiones propias de fiscalización. Y no corresponde que lo hagan, por lo demás.
Es un hecho relevante también que nosotros nos propusimos de manera muy férrea mantener nuestra independencia. Eso se ha reconocido y respetado de parte de los distintos mundos. Han respetado que este es un organismo técnico y autónomo en sus decisiones. Eso ha contribuido a poder trabajar más tranquilos.
- ¿No ha visto nada de las presiones que se denunciaron en la gestión anterior del SII?
- No, y en ningún ámbito. Pongo como ejemplo el tema del rechazo como gasto de las costas judiciales a las Isapres. Es algo netamente técnico que por supuesto las Isapres no comparten, pero nosotros estamos haciendo nuestro trabajo. Fuera de que nos reunimos con todos los actores, finalmente la decisión la tomamos nosotros y absolutamente nadie me llamó para pedirme algo o influir en esa decisión.
- Se ha criticado mucho que el SII ha sido lento en ejercer la acción penal en algunos casos de platas políticas. ¿Cómo recibe esas críticas?
- Primero, quiero reiterar una vez más que el servicio no tiene por misión ni por función perseguir las platas políticas, al servicio no le corresponde fiscalizar el financiamiento de las campañas políticas. Al servicio le corresponde fiscalizar el cumplimiento tributario. Desde esa perspectiva, obviamente sigo afirmando no sólo que esas críticas son injustas, sino que también son infundadas y supongo que vienen de la ignorancia, de no conocer cuál es el verdadero rol del servicio.
Ahora, es evidente que esas críticas han ido disminuyendo. Y lo han hecho porque el país ha entendido cuál es el rol de Impuestos Internos, que está lejos de ir persiguiendo el financiamiento de las campañas.
Por supuesto que si en ese tipo de ilícitos o en otros se utiliza de manera dolosa la norma tributaria, ahí entramos nosotros. Y lo hacemos con todas nuestras herramientas, incluyendo en el extremo y de manera muy excepcional las querellas o acción penal.
- ¿Se seguirá utilizando de manera excepcional la querella?
- La querella es un recurso excepcional que contribuye al objetivo de que los contribuyentes cumplan con las normas tributarias. Pero tenemos muchas otras alternativas, como las sanciones administrativas, las multas, las liquidaciones, las auditorías. Hemos sido muy coherentes en nuestra acción, las querellas siguen siendo una excepción.
Respecto a que nuestro accionar habría sido lento, no comparto esa apreciación. Al servicio, antes que nada, le interesa hacer un trabajo riguroso y, por lo tanto, los procesos de recopilación de antecedentes toman el tiempo que deben tomar para efecto de ser lo más riguroso posible. Hay que darle el tiempo que corresponde a nuestros funcionarios para que el trabajo se haga bien.
- Si bien técnicamente en algunos casos lo correcto es una salida administrativa, cuesta explicárselo a la ciudadanía. ¿El resultado de estos casos podría generar frustración en la opinión pública?
- Lamentablemente, cuando se iniciaron estos casos hace un par de años se generaron expectativas equivocadas, que no se iban a cumplir. La gente asumió que todas estas penas se pagaban con cárcel y eso no es así. Y si bien no se han terminado de cerrar los distintos casos, ya los primeros sancionados han pagado de otras formas sus acciones.
Ahora, no creo que haya impunidad. Si creemos que si no hay cárcel hay impunidad, estamos equivocados. La reparación de un delito tributario se puede hacer de muchas maneras.
La emisión de boletas falsas no solo se utilizó para efectos de financiar campañas políticas, sino también se ha utilizado para rebajar gastos sin tener que ver con temas relacionados a campañas políticas. Y el SII es muy responsable en ese sentido y está lejos de propiciar impunidad. El SII sanciona de acuerdo a criterios históricos y a la proporción de la falta. Eso demuestra que no hay impunidad, pero insisto en que si la opinión pública cree que por el hecho de no haber pena de cárcel hay impunidad, me parece que hay un desconocimiento que es importante aclarar de tal forma que no se genere una frustración.
Los ejes del próximo año
- ¿Cuáles son las prioridades 2017?
- El primer año establecimos cuatro ejes de trabajo: modernización institucional, excelencia en la gestión, desarrollo de las personas y fortalecimiento de las comunicaciones. Para el próximo hemos agregado cuatro más: la transversalización del modelo de gestión del cumplimiento tributario; un nuevo modelo de atención y asistencia al contribuyente; completar la implementación de la reforma tributaria y reimplementar un modelo de gestión por procesos.
- ¿Se ha ido convenciendo de que la mayoría de los contribuyentes cumplen con sus obligaciones?
- Hay un 98% de los contribuyentes que cumple y cumplen voluntariamente. Ahora, no tenemos que descuidar esa disposición ni ponerla en riesgo, por eso es tan importante que a los contribuyentes que cumplen se les den facilidades para que lo sigan haciendo. Y por supuesto que para ese pequeño porcentaje de contribuyentes que no cumplan, todo el peso y rigor de la fiscalización y de las normas.
- ¿Ha visto un cambio cultural en ese 2% que no cumple?
- La evasión está disminuyendo, eso se debe en parte a que hoy existe un nuevo paradigma a nivel mundial respecto al cumplimiento tributario. Lo ha dicho la OCDE. En todos los países los contribuyentes más reticentes se están dando cuenta de que cada vez es más difícil no cumplir las normas.
Obviamente, aquel que no quiere cumplir va a buscar siempre la manera de no hacerlo, pero empieza a haber un consenso entre los distintos países de que hay que ponerle dificultades a aquellos que pretenden burlar las normas tributarias. Eso legitima la acción del servicio y aquellos contribuyentes que antes estaban más propensos a incumplir, se dan cuenta que hoy tienen el camino más difícil.
En eso también la reforma tributaria ha hecho lo suyo, particularmente la norma antielusión.
estafas: 200 empresas bajo la lupa
- ¿Qué novedades hay en las investigaciones respecto a las estafas piramidales? Me refiero a casos como AC Inversions, IM Forex y Arcano, entre otros.
- No me puedo referir a los casos porque están en desarrollo. Pero sí puedo decir que estamos investigando a diez empresas con modelos de negocios similares. Los procesos de fiscalización registran diversos grados de avance, pero a estas empresas ya se le han girado diferencias de impuestos por más de $ 15.700 millones en su conjunto. Y también estamos fiscalizando a 200 empresas que invirtieron en estas compañías, eso está en pleno desarrollo.
Y dejamos para una tercera etapa la fiscalización de las personas que invirtieron en estas empresas, aunque muchos de ellos ya han rectificado sus declaraciones de impuestos.
Quienes cometieron ilícitos desde el punto de vista tributario, como no declarar las ganancias obtenidas mediante estas empresas, están empezando a reparar el daño.
SII acusa "sobrerreacción" por solicitud a asesores tributarios
- ¿Cómo vio la reacción del Colegio de Abogados a la solicitud de información que hizo el SII a contribuyentes?
- Ha habido una cierta sobrerreacción de algunos asesores tributarios, no todos, y es muy importante hacer esa distinción. Nos hemos juntado y lo hemos conversado con distintos asesores y con grupos que reúnen a asesores tributarios, por eso digo que la sobrerreacción es solo de algunos.
Ahora, obviamente no compartimos esa sobrerreacción, ya que lo dijimos desde el primer día: esto forma parte de un estudio que está haciendo la OCDE. Entonces, no podemos restarnos a este análisis y se hace en un contexto de un nuevo paradigma del cumplimiento tributario, donde por lo demás se quiere hacer un análisis más fino de cuál es el rol de los intermediarios tributarios en los distintos países. Ese es el sentido del estudio.
Los contribuyentes a quienes hemos notificado han entendido eso. Al viernes de la semana pasada, el 78% de los contribuyentes notificados ya habían concurrido al servicio y habían entregado la información. Los resultados demuestran que los contribuyentes no tienen problemas en contarle y compartir con la administración tributaria la situación.
- Usted dice que pocos han reaccionado, pero el Colegio de Abogados es un gremio importante...
- Sí, es un gremio importante pero entendemos que el colegio se hizo cargo de la inquietud específica de algunos asociados, que conforman el grupo tributario. Además, obviamente no compartimos la opinión de este grupo que señala que estaríamos atentando contra el secreto profesional, ¡mal podríamos hacerlo! El propio Código Tributario establece que no podemos sobrepasar el secreto profesional. Además, siempre los abogados -ante una acción del servicio- han podido ampararse en el secreto profesional, aunque esta vez muy pocos lo han hecho.
- ¿Se le viene más pesada la pista a los asesores tributarios?
- El mundo cambió y en el ámbito del cumplimiento tributario, también. Los intermediarios tributarios -y así lo ha dicho la OCDE- tienen la responsabilidad de colaborar con la transparencia y con el cumplimiento de las normas tributarias.
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