Expectativas empresariales escalan
a un nuevo máximo en octubre

El último trimestre de 2010 muestra un clima de optimismo empresarial sin precedentes en los últimos años. Según la Cámara de Comercio de Santiago (CCS), el fuerte crecimiento del PIB del tercer trimestre (sobre 7%), la fortaleza económica y financiera que ha adquirido la región en el contexto internacional, el favorable ciclo de los commodities y las expectativas de crecimiento para 2011, respaldan el espiral de optimismo por el que pasa la economía chilena.

Así el Índice de Expectativas Empresariales (IEE) de la entidad, mostró un nuevo máximo de 78 puntos (en una escala de 0 a 100) en su medición de octubre, avanzando en 2 puntos adicionales desde el anterior récord marcado en junio. Este, a juicio de la CCS, es un panorama que difiere radicalmente del observado en Estados Unidos, cuyo índice de expectativas empresariales cayó de 62 puntos en junio a 50 en septiembre, situándose al borde del pesimismo económico.

La superación del IEE abarca todos los ámbitos monitoreados por la CCS entre las empresas, indistintamente de su tamaño y de los ámbitos económicos en que se desempeñan. No obstante, se destaca el sector transporte con un avance muy importante que significó un aumento de 15 puntos, y que sobresale del rango en que avanzaron los demás sectores, entre los 2 y los 5 puntos. 
“Esto es sugerente y augura una gran actividad en comercio, industria y construcción en los próximos trimestres, que son actividades fuertemente demandantes de movilización de carga física hacia los diferentes centros de consumo o inversión a lo largo del país”, afirma la CCS. 
La mejoría detectada en el sentimiento de negocios se relaciona no sólo con un favorable panorama en términos de actividad empresarial (mejores expectativas de ventas, inversión y empleo), sino también en una percepción muy positiva sobre las condiciones globales del país en el mediano plazo. De hecho, al consultar a las empresas cómo evalúan las condiciones económicas de los próximos 12 meses, un 68% apuesta por una superación, un 29% por condiciones similares a las actuales y sólo un 3% piensa en un deterioro.