Ana Lya Uriarte vuelve al gobierno como asesora legislativa del Ministerio de Energía

En términos deportivos es un refuerzo bombástico. Desde el próximo lunes la exministra Secretaria General de la Presidencia (Segpres), Ana Lya Uriarte, vuelve al ruedo tras dejar La Moneda en abril pasado -ante las consecuencias del long Covid que la afectó- y arribará al Ministerio de Energía en calidad de asesora legislativa.

La abogada-que ya se recuperó de su problema de salud- llega a reforzar el equipo que buscará sacar adelante el proyecto de transición energética que se lanzó en julio y que forma parte de la agenda inicial para el segundo tiempo que impulsa el gobierno del Presidente Boric, todo en medio de los problemas financieros que han advertido algunas firmas de energía renovables.

El análisis que hicieron desde la cartera dirigida por Diego Pardow es que el proyecto es de suma importancia, ya que incluye medidas que promueven acciones con las que se buscan incentivar las inversiones necesarias para el proceso de descarbonización. Por lo tanto, la llegada de Uriarte viene a reforzar el diálogo con los parlamentarios, así como con gremios y otros públicos de interés.

El arribo de la exjefa de gabinete de la Presidenta Bachelet en su segundo periodo también responde a lo complejo que se ha tornado tramitar proyectos en el poder legislativo, por lo que contar con Uriarte puede ayudar a encontrar más consensos.

Cercanos destacan que al momento de analizar estrategias para enfrentar la tramitación de la ley, Pardow pensó en la exministra, con quien coincidió -y tuvieron una buena relación- en el gabinete.

La primera semana de Uriarte coincide con que el Ministerio de Energía fue invitado a exponer sobre el proyecto de transición energética en la comisión de Minería y Energía del Senado. Para el miércoles se espera no solo la asistencia de la cartera, sino que también de los gremios de Generadoras, la Asociación Chilena de Energía Solar y la Asociación de Concentración Solar de Potencia.

Los ejes de la iniciativa

El proyecto de transición energética o denominado proyecto que “modifica la Ley General de Servicios Eléctricos, en materia de transición energética que posiciona a la transmisión eléctrica como un sector habilitante para la carbono neutralidad” cuenta con tres pilares.

El primero, es que la iniciativa busca permitir un desarrollo eficiente de las obras de transmisión eléctrica.

El segundo pilar es que se pretende hacer cargo de los desafíos del proceso de transición en términos de la organización industrial del sector de generación.

Mientras que el tercer eje tiene que ver con habilitar el anuncio presidencial respecto de licitar para los próximos años un sistema de almacenamiento de gran escala, lo que contempla una licitación de sistemas de almacenamiento para localidades del norte grande con una inversión estimada en unos US$ 2.000 millones.

“Con estos tres pilares, hacernos cargos de los problemas de transmisión más apremiantes, resolver esta estrechez financiera con una solución que es consistente con nuestra historia institucional y con reglas permanentes y facilitar el despliegue de tecnologías de almacenamiento, creemos que ya vamos a poder mirar el próximo año con mayor tranquilidad respecto de nuestros compromisos climáticos”, dijo el ministro Pardow hace unas semanas cuando dio a conocer el proyecto.