El IPSA se desploma en una jornada de pánico y termina con el mayor descenso de últimos 13 años

Pánico fue la descripción exacta para la bolsa local ayer. La ola negativa global dio lugar a una pérdida en el IPSA de 6,92%, su caída más profunda desde 1998. El comportamiento, marcadamente vendedor, rompió el piso de los 4.000 puntos para situarse en los 3.790,49. Este desmoronamiento se tradujo en una fuga en capitalización bursátil de US$ 15.040,86 millones. 
En la plaza la sesión fue intensa, con operaciones de venta cortas desde varios sectores, especialmente institucionales, que intentaron quedarse con el margen más alto posible de rentabilidad.

Aunque la tendencia estuvo impulsada por el rendimiento global, Rodrigo Andaur de Fit Research señala que “resultados corporativos más débiles, ruidos políticos-económicos, alzas de tasa y la gran cantidad de colocaciones” presionaron al IPSA.

Con estos resultados, es incierto dónde cerrará el indicador a fin de año. Francisco Errandonea de Santander pronostica que el IPSA para diciembre estaría un rendimiento negativo o en cero. “No creemos que pueda tener un rebote como para superar los 4.967 puntos con los que comenzó el año”, agrega. Elizabeth Palma de Tanner agrega que “según algunos modelos” el Ipsa podría seguir a los 3.700 puntos.