La Bolsa de Nueva York volvió a cerrar hoy en terreno negativo lastrada por la crisis en Libia y su principal indicador, el Dow Jones de Industriales, acabó con un descenso del 0,88% en un día en el que el crudo de Texas llegó a tocar momentáneamente los US$ 100 por barril.
Ese índice, que agrupa las 30 mayores empresas cotizadas de EE.UU., terminó con 12.105,78 unidades, el selectivo S&P 500 cedió un 0,61%, hasta los 1.307,40 puntos, y el índice compuesto del mercado Nasdaq descendió el 1,21% (-33,43 unidades) hasta 2.722,99.
El parqué neoyorquino mantuvo durante la mayor parte de la jornada los números rojos con lo que ya había acabado el día anterior, arrastrado por la crisis en Libia que ha provocado también la fuga de inversores al petróleo de Texas, una materia prima que, después de tocar momentáneamente los 100 dólares por barril, ha cerrado a US$ 98,1 por barril, su nivel más alto desde octubre de 2008.
El crudo ha continuado encareciéndose, como ya lo hizo en la jornada pasada, afectado por los recortes de producción petrolífera en el país magrebí -el noveno productor de los doce miembros de la OPEP- a causa de las protestas populares en contra del régimen de Muamar el Gadafi.
La represión en Libia se podría haber saldado con 10.000 muertos, según el miembro libio de la Corte Penal Internacional (CPI) Sayed al Shanuka, mientras que informaciones cada vez más insistentes y que provienen de diferentes fuentes confirman que amplias zonas del país empiezan a estar fuera del dominio del régimen de Trípoli.
En el descenso con el que cerró el Dow Jones de Industriales tuvo que ver, además de la crisis libia, la caída del 9,62% de la tecnológica Hewlett-Packard castigada por los resultados presentados al cierre del martes.
El grupo informático decepcionó a Wall Street al revelar que ganó US$ 2.605 millones durante su primer trimestre fiscal (noviembre-enero), lo que equivale a US$ 1,17 por acción y es un 15,7% superior a lo ganado un año antes.
En ese índice también acabaron en números rojos la tecnológica Intel (-3,03%), el conglomerado GE (-2,16%), la cadena de tiendas para mejoras del hogar Home Depot (-2,07%) y el fabricante de maquinaria pesada Caterpillar (-1,95%), entre muchas otras.
Salvaron a ese índice de una caída mayor los ascensos de las dos mayores petroleras estadounidenses, Chevron (1,94%) y Exxon (1,91%), que lideraron el terreno positivo del Dow Jones impulsadas por el miedo a los recortes en la producción de petróleo en Libia.
En el mercado Nasdaq, cuya ceremonia de cierre estuvo protagonizada por José Ramón Pérez Rivera, secretario de comercio y desarrollo económico de Puerto Rico, y representantes de la industria del ron de ese país, la tecnológica Apple acabó con un ascenso del 1,18% en un día en el que se produjo la junta anual de accionistas de esa compañía.
En otros mercados el oro se disparó de nuevo hasta los US$ 1.414 la onza, su nivel más alto en siete semanas, en lo que el dólar se debilitó frente al euro (que se cambiaba por US$ 1,3747) y la rentabilidad de la deuda pública estadounidense a diez años subía al 3,48%.
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