Economía

May opta por un Brexit “duro” y descarta que el Reino Unido permanezca en mercado único

Londres buscará reemplazar la membresía en el bloque negociando un nuevo acuerdo de libre comercio con la Unión Europea que sea “amplio, osado y ambicioso”.

Por: María Akbulyakova | Publicado: Miércoles 18 de enero de 2017 a las 04:00 hrs.
  • T+
  • T-

Compartir

Las peores expectativas sobre un Brexit “duro” se volvieron realidad, luego de que la primera ministra británica, Theresa May, presentara ayer su visión más completa hasta la fecha sobre cómo pretende concretar la salida de la Unión Europea, y descartara de plano la posibilidad de que el Reino Unido se mantenga dentro del mercado único, una esperanza que todavía albergaban los partidarios del bloque.

Sin embargo, hubo una nota de consuelo, cuando la gobernante concedió que la última palabra la tendrá el parlamento, que deberá votar lo que acuerde Londres en sus negociaciones con Bruselas.

“Quiero ser clara: lo que propondré no puede implicar la membresía del mercado único”, dijo May, explicando que va a negociar un nuevo acuerdo de libre comercio “amplio, osado y ambicioso”. El gobierno va a buscar una “alianza igualitaria” entre un Reino Unido “independiente, global y autogobernado” y la Unión Europea. “No vemos ni una membresía parcial, ni una asociada, ni nada que nos deje con una mitad adentro y otra mitad afuera”, aseguró.

Eso significa reinstalar los poderes nacionales en temas migratorios y abandonar la Corte Europea de Justicia, dos puntos que estuvieron en el corazón del voto a favor del Brexit en el referendo de junio.

Pese a su tono general duro, la primera ministra señaló que el acuerdo final será votado por los legisladores.

“Estoy segura de que el parlamento querrá basarse en el punto de vista de los británicos y respetar la decisión democrática que han tomado”, destacó.

Además, agregó que quiere evitar que las empresas queden “al borde de una disruptivo acantilado” , llamando a implementar un acuerdo “por fases” y un período transitorio.

Mientras, el ministro de Finanzas, David Hammond, aseguró ayer ante el parlamento que el gobierno “hará todo lo posible para mantener nuestra competitividad y proteger nuestros estándares de vida”.

Reacciones críticas

Escocia no se demoró en mostrar su rechazo señalando que se separará de Londres si su posición no es escuchada. “No podemos permitir al gobierno del Reino Unido sacarnos de la UE y del mercado único sin considerar el impacto sobre nuestra economía, trabajos, estándares de vida y nuestra reputación como un país abierto y tolerante”, afirmó la primera ministra, Nicola Sturgeon.

A su vez, el gobierno de Irlanda del Norte dijo que las autoridades están advertidas tanto de los “riesgos y desafíos” como de las “oportunidades” para la economía irlandesa, y van a estar involucrados “en cada aspecto del proceso de negociaciones”.

Desde Europa, el ministro del relaciones exteriores de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, felicitó a May por proveer “un poco más de claridad” pero desestimó nuevamente sus llamados a iniciar las negociaciones antes de invocar el artículo 50 que activa oficialmente el proceso de salida. “Las negociaciones empezarán cuando el Reino Unido oficialmente anuncie que desea abandonar la UE”, agregó.

Inflación al alza

Mientras May daba los primeros detalles sobre su plan para abandonar el bloque de los 28, la economía siguió dando señales del impacto que tendrá la salida del bloque. La Oficina Nacional de Estadística anunció ayer que la inflación llegó a 1,6% anual en diciembre, su nivel más alto desde mediados de 2014.

El desplome de la libra, que llegó a su mínimo frente al dólar en 30 años, ha elevado los precios al encarecer las importaciones.

“La inflación está de vuelta y va a tomar venganza. Con más pistas del Brexit duro, podemos esperar que la libra caiga más. Eso se transferirá en un aumento de la inflación en el corto plazo”, dijo Tom Stevenson, director de inversiones en Fidelity International.

 

La libra se dispara casi 3% tras discurso de la primera ministra

En contra de todos los pronósticos, la revelación de los planes del gobierno acerca del Brexit hizo que la libra se disparara 2,9% ayer, su mejor rendimiento desde 1998.


"El hecho de que el acuerdo final sea votado en el parlamento es positivo para la libra. Para que el parlamento apruebe el acuerdo, éste debe ser bueno", explicó Athanasios Vamvakidis, analista de Bank of America. "Es un claro Brexit, y eso es lo más importante", señaló, a su vez, Ian Gunner, administrador de portafolio de Altana.


Lo mismo influyó sobre la mayoría de las bolsas europeas, que había comenzado la jornada con fuertes caídas arrastradas por las declaraciones de Donald Trump sobre un quiebre definitivo del bloque y los trascendidos del anuncio de May, pero que revirtieron la tendencia cuando se conocieron los detalles del plan de la líder británica. Sin embargo, el FTSE 100, el índice de los 100 principales valores de bolsa de Londres, no pudo romper la caída y cerró con una baja de 1,5%, su peor declive desde la votación por el Brexit.


El índice fue arrastrado por las empresas exportadoras, que se ven más afectadas por el repunte de la libra, ya que encarece sus productos.


El fortalecimiento de la libra se explica también por la baja del dólar, que cayó afectado por los comentarios del presidente electo Donald Trump de que la divisa estadounidense es "demasiado fuerte".

Imagen foto_00000002

Imagen foto_00000001

Lo más leído