Editorial

Emergencia en la macrozona sur: oportuna extensión

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a decisión de decretar estado de emergencia en la macrozona, hace un mes, fue una medida extraordinaria adoptada -para muchos, tardíamente- ante la gravísima y prolongada situación de violencia y quiebre del Estado de derecho que se vive allá. Es demasiado temprano para establecer con seguridad si fue la más acertada o no -aunque la disminución de ataques y el arresto de numerosas personas entregan elementos de juicio-, pero desde el inicio fue claro que no podrían esperarse resultados positivos si el plazo original de 30 días que podía disponer el Ejecutivo, no era extendido luego por autorización del Legislativo.

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Esta semana, ambas cámaras del Congreso aprobaron extender el estado de emergencia por otros 15 días, dando así un mínimo de margen para que el decreto alcance una efectividad mayor. Esta es una decisión bienvenida, aunque sorprende el alto de parlamentarios que se opuso a ella acusando una militarización de la zona que incita a más violencia, una acción discriminatoria del Estado contra el pueblo mapuche y una falta de voluntad de diálogo por parte del gobierno (aunque no se precisa con quiénes, específicamente, debe entablarse dicho diálogo).

Entre quienes sí aprobaron extender el plazo sin duda influyeron fuertemente -más allá de posturas personales sobre este conflicto- dos factores: por un lado, dramáticos registros de ataques recientes que mostraron la violencia terrorista que por años ha vivido esa parte del país; por otro, una consulta no vinculante organizada por el gobernador y los alcaldes de La Araucanía donde el 81% de quienes respondieron votó por mantener el estado de emergencia.

Esta opinión ciudadana debe llamar a la reflexión de quienes, desde Santiago y Valparaíso -donde la violencia en la macrozona sur sólo se lee en las noticias-, aún sostienen que lo que allá ocurre es un conflicto social y no un fenómeno de corte terrorista que amenaza la paz, la propiedad y las vidas de los habitantes de La Araucanía. Sólo entendiendo esto último será posible aproximarse al problema desde el realismo necesario.

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