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Desafíos del comercio exterior de Chile y el nuevo rol de las Aduanas

Gonzalo Pereira

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Durante una semana nuestro país fue sede de la reunión anual de las Aduanas de las Américas y de las Aduanas de Iberoamérica, abriendo un espacio para el análisis del comercio internacional actual y para compartir la experiencia comparada entre todas las aduanas del continente. En el evento no sólo participaron los directores generales de nuestro continente, sino que también hubo representantes de España, Portugal, Francia, Italia y China.


El diálogo fue intenso y durante la semana también se dedicó una jornada a compartir con operadores logísticos y gremios del sector privado del continente, quienes presentaron sus puntos de vista que fueron desde la exposición de buenas prácticas hasta temas de transparencia y probidad. Se analizaron los desafíos que como región de las Américas tenemos por delante para insertarnos con eficiencia en la globalización económica. Para Chile fue todo un éxito, dado que además de lograr la sede y congregar a la élite aduanera y del comercio exterior del continente, también sirvió como instancia para firmar acuerdos con Canadá, Mercosur y la Alianza del Pacífico, lo cual permite proyectar la gestión aduanera chilena más allá de lo que muchos imaginan. A su vez, hubo una importante reunión bilateral con Estados Unidos para concretar el intercambio de información en lo relativo a la declaración anticipada de carga y la capacitación de nuestros aduaneros en los centros norteamericanos de análisis de riesgos, sumado a otras reuniones bilaterales con Bolivia, Cuba, China, Argentina y los máximos líderes de la Organización Mundial de Aduanas.


Todas estas acciones confluyen para aportar a la implementación del Acuerdo sobre Facilitación del Comercio (AFC) adoptado en el marco de la Organización Mundial del Comercio (OMC).


La aduana chilena –cuyas operaciones aportan más de 34% de los ingresos tributarios totales al Estado- desarrolla una nueva gestión tendiente a asumir los desafíos que representa la vorágine del comercio internacional. Tenemos un escenario en constante evolución y que va más allá de las fronteras e incluso de los tiempos y la materialidad, puesto que hoy desde un smartphone se pueden hacer transacciones de importación y exportación.


La globalización y sus desafíos no esperan. Por lo mismo, como Aduanas nuestras acciones apuntan a permitir que Chile siga ocupando puestos de avanzada en materia de competitividad. Todo esto sin descuidar en ningún minuto la fiscalización, que es, en definitiva, el valor agregado que ofrecemos al resto del mundo y en especial a nuestros ciudadanos.


Las próximas reuniones de las Aduanas de América, el Caribe y España y Portugal se realizarán en abril del 2016 en Santa Cruz, Bolivia, donde esperamos volver a exhibir los avances del capital aduanero chileno y nuestro liderazgo como una economía segura y abierta al mundo.

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