Bendito descanso

Padre Hugo Tagle

Cuesta desentenderse de la agenda mediática, la que consume tanto papel como neuronas. Desde las discusiones en torno al binominal, hasta el asunto de las nanas, que al parecer viene con segunda parte como lo anuncian los diarios.

Por lo mismo, a muchos les hará más que bien una pequeña pausa, ojala no tan breve, para desintoxicarse y oxigenar el alma. Hacer un buen “lavado interior”, y esto, al menos una vez al año. Por uno mismo y por los demás. El hecho de hacer buenas vacaciones, descansar, “desenchufarse” de lo cotidiano, no es un asunto solo personal: Es social. Su entorno lo agradecerá.

Un par de consejos para los que tomen vacaciones en estas semanas. Se trata de distraerse sanamente, oxigenar bien el cuerpo. Por lo mismo, tómelo en serio. Aunque sean pocos días. Y quizá los aproveche mejor que si fueran varias semanas.

Dedíquele tiempo a la familia. Es tiempo ideal para esas conversaciones que no se tienen durante el año. Y si tiene hijos, dígales que al menos una parte de las vacaciones será solo del grupo familiar, sin amigos extras.

Haga deporte. Lo que sea, aunque sea largas caminatas. Lea un buen libro. Al menos 400 páginas. Está lleno de buenas novelas. Si no le gusta, hágalo al menos para dar un buen ejemplo a otros.

Vacaciones no es ir “de evento en evento”; llenar las noches con actividades, encuentros, compromisos que finalmente existen sólo en la cabeza. Se trata de hacer un esfuerzo por desconectarse y así rendir mejor al término de ellas. Grandes ideas surgen en momentos de silencio y reflexión.

Dedíquele un tiempo a Dios. Quizá aumentando en algo esos ejercicios religiosos que lo acompañaron en el año. Y si no, al menos invierta unos minutos diarios en una pequeña reflexión o lectura espiritual. Desconecte la música, las noticias o el video. Como sea, busque algo de intimidad y soledad. Ello le permitirá afrontar el año con mayores energías, sabiduría y optimismo.

Pero sería bueno también ayudar a otros a hacer vacaciones. Si es jefe, respete los horarios de comienzo y término de las vacaciones de sus subalternos. Un buen jefe no molesta a mitad de vacaciones. Cierre bien sus compromisos: trabajo que le corresponde a usted y que no realiza, lo terminará haciendo otro. Y eso no es justo, salvo que lo hayan acordado así.

Hacer vacaciones con otros no es “a costa” de ellos. El resto no son mis sirvientes: hágale la vida feliz a los demás y tendrá buen descanso.

Y bueno, que a muchos les hará bien desconectarse. Que marzo traerá su propia agenda.