Aysén es la región del país que más creció durante el primer trimestre del año, al anotar una expansión de 25,2% respecto al mismo período del año pasado. Un dinamismo que se explica principalmente por el dinamismo que muestra la actividad salmonera en dicha zona.
De acuerdo al Indicador de Actividad Económica Regional que entrega el INE, el comportamiento verificado en la undécima región fue explicado por nueve de los once sectores que integran el índice.
Otros crecimientos destacados, aunque a gran distancia del de Aysén, fueron los de Antofagasta (9,15) y Arica y Parinacota (8,6%).
Si bien son positivos los de
sempeños verificados, también es importante señalar que muchas veces el ojo centralista que nos ha caracterizado como país desde hace muchos años hace que no se vean tan claramente las amplias brechas de desarrollo que aún existen en varias regiones. Pero más plantear un punto de vista crítico, hay que considerar que se trata de una oportunidad para seguir descubriendo todo el potencial que existe en los distintos puntos de Chile. La preocupación por las regiones no puede ser sólo un discurso de campaña electoral, sino que una prioridad permanente para un desarrollo parejo del país.