Click acá para ir directamente al contenido
Editorial

La renuncia del ministro de Hacienda

Por: Equipo DF

Publicado: Viernes 22 de agosto de 2025 a las 04:00 hrs.

A menos de siete meses del término del Gobierno, el ministro de Hacienda, Mario Marcel, presentó su renuncia, argumentando razones personales, tras haber desempeñado un rol central como garante de estabilidad económica, desde el inicio de la actual administración. Con su llegada a Hacienda, en marzo de 2022, el Gobierno de Gabriel Boric buscó ofrecer una señal de responsabilidad y disciplina fiscal, frente a un programa marcado por un giro político hacia la izquierda, cargado de reformas estructurales y un ánimo refundacional, que generaba inquietud en los mercados y desconfianza entre los inversionistas. Con su salida, se abre ahora un flanco de incertidumbre en el terreno donde Marcel ofrecía mayor contención: la conducción fiscal, la confianza y el equilibrio frente a las pulsiones más ideológicas del oficialismo.

Marcel logró contener un mayor desborde de las finanzas públicas, tarea que es fundamental que su sucesor continúe.

Cercano al Partido Socialista y de larga trayectoria en los gobiernos de centroizquierda desde el retorno a la democracia en 1990, el ahora exministro aterrizó en Hacienda respaldado por un desempeño que ofrecía garantías técnicas, un perfil moderado y compromiso con la disciplina fiscal. Ejemplo de ello fueron sus advertencias, en 2019 mientras era titular del instituto emisor, sobre los efectos económicos del estallido social, y su firme oposición a los retiros de fondos de pensiones durante la pandemia.

Con todo, Marcel no fue ajeno al proyecto de Gobierno: compartió sus premisas y lo representó en momentos clave, tanto en materia fiscal como en la promoción de reformas estructurales que, en su conjunto, fueron cuestionadas por la ciudadanía, tanto en los procesos constitucionales como en la persistente baja aprobación de la administración.

No obstante, como dijo a DF el expresidente del Banco Central, Vittorio Corbo, con su gestión logró “contener un mayor desborde de las finanzas públicas frente a las numerosas presiones por aumentos de gasto fiscal”. Tras tres años y medio en el cargo, sus resultados son mixtos: logró estabilizar la economía, luego de la pandemia y recuperar la confianza de los mercados, pero fue perdiendo margen, tanto por el fracaso de la reforma tributaria a comienzos del Gobierno, como por su sostenida defensa de la directora de Presupuestos, cuyos errores en proyecciones fiscales restaron credibilidad a las cifras oficiales. En materia de disciplina fiscal, un ámbito que se considera su fuerte, hubo decepción, luego de los incumplimientos de la meta en 2023, 2024 y muy probablemente en 2025. En contraste, uno de sus mayores logros fue la aprobación de la reforma de pensiones, en conjunto con la entonces ministra del Trabajo, Jeannette Jara.

En materia de crecimiento, Marcel logró pasar de una contracción de 2,6% en 2022 a una expansión de 2,6% en 2024, con una proyección en torno a 2,5% este año. Y en ese marco dio certidumbre, continuidad y credibilidad a los mercados. Con su sucesor, Nicolás Grau,  se abren interrogantes. Del ahora exministro de Economía se desconoce su capacidad de manejo de las cuentas fiscales, en un escenario en que la tarea prioritaria de Hacienda es la preparación del Presupuesto 2026, el cierre de brechas y la contención del déficit. En este escenario, es fundamental que el nuevo titular de las finanzas públicas combine disciplina fiscal con capacidad de negociación política. El cierre del ciclo exige responsabilidad, no nuevos desbalances que comprometan el inicio del próximo gobierno.

Te recomendamos