Como “preocupante” manifestó el presidente de Eléctrica Puntilla, Pablo Pérez Cruz, el curso que está tomando la tramitación de la reforma al Código de Aguas que actualmente se discute en el Congreso.
Más precisamente, el también presidente de la Sociedad de Canalistas del Maipo, apuntó a la idea que se refiere a elevar el caudal ecológico de manera retroactiva, lo que sería aplicado a las obras que poseen sus derechos de agua ya constituidos.
El empresario comentó que “en un país donde el 80% del agua se vierte al mar sin haber sido utilizada, parece razonable impulsar políticas para hacer más eficiente el uso, que afectar los derechos que permiten planificar inversiones que son necesarias para el desarrollo del país”.
Pérez Cruz planteó esta inquietud en el marco de la inauguración de la central hidroeléctrica Itata, acto al que también asistió el ministro de Energía, Máximo Pacheco, quien confirmó que esta inquietud está siendo monitoreada por el Comité de Aguas, instancia que encabeza el titular de Obras Públicas, Alberto Undurraga.
Añadió que “queremos que se llegue a un buen fin, que por un lado el agua para consumo humano sea prioritaria y por otro conciliar con la generación eléctrica, la agricultura y los usos industriales, para lo que hemos escuchado a las distintas partes”.
Una central “modelo”
El secretario de Estado aseguró que “este es un ejemplo de lo que se quiere desarrollar en el país, proyectos amigables con el medioambiente y con los vecinos” y agregó que “este tipo de asociatividad queremos ver en todos los proyectos energéticos y, por cierto, esperamos que sea parte también de los otros doce proyectos que se están desarrollando en la provincia y pueden significar un aporte de 93 MW y una inversión de US$ 243 millones” puntualizó.
En concreto, la central Itata está ubicada a un costado del río del mismo nombre en la Región del Biobío y generará 20 MW que serán inyectados al Sistema Interconectado Central (SIC).
La fecha de operación comercial de la unidad aún no está definida, porque el río aún no alcanza el caudal correspondiente para realizar las últimas pruebas.
El proyecto implicó una inversión total de US$ 55 millones y se destaca que las aguas del río son captadas sólo 150 mts aguas arriba del salto con una bocatoma lateral que no interviene el cauce ni genera embalses que alteren el nivel del río.
Otra de las inversiones de Eléctrica Puntilla en la región, es la central Ñuble, cuya construcción actualmente se está en una etapa inicial, luego de haber reiniciado las obras en febrero de este año.
El presidente de la empresa confirmó que este proyecto es siete veces más grande que la central Itata, con una producción de 136 MW, pueda entrar en operación hacia fines de 2018.
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