Por Fiona Tam
En la víspera de los World University Games, que fueron inaugurados la semana pasada, los medios locales como
Sznews.com informaron que Shenzhen gastó 12.000 millones de yuanes
(US$ 1.877 millones) durante 22 meses, para entregar 15.000 edificios junto con la renovación de los 300 principales caminos, la renovación de las rejas de hierro en las carreteras para evitar que crucen peatones descuidados y mejorando también 25 caminos principales y peajes en once carreteras.
La cuenta de la ciudad por los Juegos también incluye 4.100 millones de yuanes por el World University Games Center, con 60 mil asientos outdoor. Luego está el costo de la seguridad, que se espera alcance decenas de millones de yuanes y se enfoque en gran parte en contener potenciales manifestaciones de descontento social.
Cerca de 15 mil policías paramilitares se despacharon a la ciudad desde Shangai y desde la provincia de Guangdong, más 5 mil de Shenzhen. Ellos están encargados de proteger el transporte público, las sedes deportivas, los cuarteles del gobierno y las fronteras con las ciudades vecinas Dongguan y Huizhou.
El mes pasado, 950 personas fueron arrestadas intentando ingresar a Shenzhen con artículo prohibidos, como balas y explosivos, informó el Nanfang Daily.
Pero todo el gasto se ve pequeño al lado de los 75.000 millones de yuanes invertidos en cinco líneas subterráneas que abrieron hace dos meses. El número de estaciones fue elevado de 18 a 118 y 157 kilómetros de líneas se añadieron para vincular el centro de la ciudad con el aeropuerto y los distritos periféricos. Anteriormente habían sólo dos líneas de metro.
El profesor Cheng Jiansan de la Academia de Ciencias Sociales de Guangdong, advirtió que Shenzhen podrían verse agobiado por las deudas por ser anfitrión de los World University Games. “Enormes deudas que seguirán a una fuerte inversión en infraestructura definitivamente afectarán el desarrollo futuro de la ciudad, especialmente dado que el beneficio de los Juegos es muy poco”, dijo.
Para preparar los Juegos de Asia del año parado, Guangzhou gastó 73.000 millones de yuanes construyendo nuevas líneas subterráneas y casi 14.000 millones de yuanes en construir y operar estadios. New Express reportó que Guangzhou tenía cerca de 210.000 millones en deudas después de los juegos, citando a un legislador provincial.
“Los negativos efectos que traigan las grandes deudas pueden no emerger inmediatamente, pero los gobiernos locales tendrán que llevar la carga durante los próximos tres a cinco años”, afirmó Cheng.
El analista político Jin Xinyi explicó que los World University Games han permitido que Shenzhen rápidamente desarrolle los alrededores del distrito de Longgang y mejore la infraestructura de la ciudad. Sin embargo, la corrupción, el gasto excesivo y las duras medidas de seguridad relacionadas con la celebración de los Juegos, están perjudicando la buena reputación que tenía Shenzhen.
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