Autos usados, barómetro de la economía familiar
Señor Director:
A diferencia del mercado de vehículos nuevos -altamente sensible a la volatilidad internacional, el tipo de cambio y las tasas de interés-, el de autos usados ha demostrado una resiliencia que lo posiciona como un indicador más realista de las decisiones de consumo de los hogares chilenos. Incluso en contextos marcados por incertidumbre global o restricciones de liquidez, la compraventa de autos usados no se detiene, sino que se adapta. No hablamos solo de movilidad: hablamos de activos que circulan, se valorizan o deprecian en función de necesidades inmediatas, ahorro familiar, acceso al crédito y percepción de estabilidad. Su dinamismo está menos atado a la macroeconomía y más conectado con la economía cotidiana.
Hoy, mirar este mercado no es solo entender cómo se mueve el transporte, sino cómo se comporta el consumidor frente a la incertidumbre.
Ignacio Schiattino
Gerente General Hub Automotriz