Señora Directora:
Ya no se trata de si uno estuvo a favor o en contra de hacer una nueva Constitución, sino de mirar sin anteojeras el trabajo de las personas que elegimos para redactarla.
Pero la verdad es que de "trabajo", muy poco; mientras que de polémicas, escándalos y peleas internas, mucho. Algunos dicen que decir esto es desprestigiar a la Convención; otros creemos que se desprestigia sin ayuda de nadie.
Marcos L. Fernández