Mirada pública

Paul Romer es un economista norteamericano de 55 años, ex alumno de la Universidad de Chicago y experto en materias de crecimiento de la economía. Tenía una cómoda vida académica hasta que decidió hacer un cambio de fondo: se la está jugando full time por organizar, en algún país del mundo, una ciudad modelo. Esta sería una ciudad con buenas leyes económica. Es decir, abierta al comercio de bienes y servicios; con leyes de inmigración muy permisivas que aceptarían recibir a todos los que quisieran vivir en ella; leyes muy abiertas para la inversión extranjera en todos los sectores de la economía y también con bajísimos impuestos a personas y empresas para incentivarlas a invertir en Ciudad Modelo. 


La idea de Romer es demostrar que las buenas leyes económicas hacen una diferencia sustancial en el crecimiento económico y en el nivel de vida de sus habitantes. Romer está tratando de que su Ciudad Modelo tenga un tratado con un país bien gobernado (Noruega, Canadá, por ejemplo) y que ese país sirva de garante para que las buenas leyes se mantengan en el tiempo. Quiere lograr algo parecido a la colonia inglesa de Hong Kong, antes de que esta pasara a formar parte de China. Una especia de Hong Kong moderna.

¿Existe algún país democrático del mundo dispuesto a permitir la creación de Ciudad Modelo dentro de sus fronteras? Romer se dispuso a buscarlo y estaba hablando con varios países de Africa cuando recibió un llamado de altas autoridades de Honduras, las cuales le afirmaron que ellos consideraría albergar a Ciudad Modelo. Honduras es un país ideal. Un país de 7,5 millones de habitantes y muchos de ellos abandonando el país por falta de oportunidades. A lo mejor Ciudad Modelo podría terminar con este éxodo y contribuir a la vuelta del optimismo a Honduras.

Hace algunas semanas se votó en el Congreso hondureño la idea de permitir la creación de Ciudad Modelo dentro de sus fronteras y, contrario a lo que muchos pensaban, la modificación constitucional necesaria se aprobó sólo con un voto en contra. ¿Sorprendido? Yo también.

“Este es un país en que la mayoría quiere lograr el sueño americano”, afirma el jefe de Gabinete del actual presidente. “Hoy los hondureños deben abandonar su país e irse a EEUU en busca de progreso personal y familiar. Este proyecto permitiría que, en el largo plazo, mis compatriotas pudieran cumplir el sueño americano en su país”.

Muchos estarán mirando los resultados de Ciudad Modelo si ésta finalmente se instala en algún país del mundo. Entre ellos estarán todos los economistas ligados al tema del crecimiento económico, los cuales podrán observar, por primera vez en sus vidas, el resultado de implementar sus “recetas” respecto del crecimiento económico en un experimento casi de laboratorio. La economía es una ciencia social y por ello pocas veces existen las posibilidades para verificar sus hipótesis en un laboratorio. Sin duda una de estas posibilidades es Ciudad Modelo y será interesante ver lo que allí ocurre. Ojalá que si las teorías de los economistas se comprueban verdaderas, los líderes de todos los países del mundo sub desarrollado escuchen y tengan la valentía de implementar en sus países las ideas demostradas verdaderas en Ciudad Modelo. ¿Será mucho pedir? Ojalá que no para beneficio de los millones que aspiran a una vida mejor.