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Tormenta geopolítica: ¿Por qué los mercados están tan tranquilos?

Ruchir Sharma © 2023 The Financial Times Ltd.

Por: Ruchir Sharma | Publicado: Jueves 26 de octubre de 2023 a las 04:00 hrs.
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Ruchir Sharma

Los ataques de este mes en Israel han hecho temer un conflicto más amplio en el Medio Oriente, incluso una Tercera Guerra Mundial. Voces serias afirman que éste es el momento más peligroso que se recuerda, con amenazas acechando desde Rusia, China, Corea del Norte e Irán.

Pero los mercados financieros han reaccionado con moderación a la conflagración que se está gestando en Gaza. El índice de referencia estadounidense S&P 500 apenas se ha movido desde el ataque de Hamás del 7 de octubre. Incluso los mercados bursátiles más cercanos a la zona de combate, desde Arabia Saudita hasta Egipto y los países del Golfo, han experimentado retrocesos moderados. En los mercados de bonos, donde los precios han estado cayendo, no se ha producido ninguna huida en busca de seguridad, y tampoco ha habido mucho drama en los precios del petróleo.

“Los individuos tienen razones para idealizar el pasado mientras se sienten ansiosos por el futuro. La mente colectiva del mercado, en cambio, a menudo parece hacer evaluaciones más equilibradas y desapasionadas de las amenazas”.

Es como si los mercados creyeran que el conflicto no alcanzará el nivel de los peores temores, como suele ocurrir en las crisis geopolíticas. En los días posteriores a los atentados terroristas del 11 de septiembre en EEUU — muy citados como análogos a los del 7 de octubre en Israel — EEUU estaba en alerta roja ante otro ataque. El S&P 500 cayó un 12%, una caída magnificada, sin duda, por el hecho de que EEUU se encontraba en el sexto mes de una recesión de ocho meses. Pero esa fase pasó rápidamente: para el 11 de octubre el S&P 500 ya había recuperado todas sus pérdidas.

El mismo patrón puede rastrearse mucho antes.

Como grupo, los inversionistas parecen reaccionar ante las crisis de forma diferente a como lo hacen los individuos. Para los individuos, la historia se recuerda mejor de lo que se vive. La mente tiende a olvidar los momentos de incertidumbre y a recordar el pasado como los buenos tiempos. Frente a unos recuerdos que se ‘desinfectan’ con el tiempo, la crisis más reciente destacará como especialmente peligrosa. Esto no es irracional: en el fragor del momento, el resultado siempre es incierto.

La mente colectiva del mercado, en cambio, reconoce el riesgo geopolítico como una constante histórica y enmarca los momentos de tensión en ese contexto. ¿Está claro, por ejemplo, que el Medio Oriente es más riesgoso ahora que durante cualquiera de las grandes conflagraciones que se han producido allí desde la Segunda Guerra Mundial? ¿Que Rusia es una potencia más peligrosa tras la pérdida de la mitad de su capacidad de combate en Ucrania? ¿Que China constituye actualmente una mayor amenaza, a pesar del constante debilitamiento de su economía?

La totalidad de estas amenazas es muy incierta y debatible; el mercado, una agregación de millones de opiniones, se inclina por no precipitarse a juzgar.

La comprensión de las crisis geopolíticas como una constante histórica estabiliza los mercados en medio de la tormenta. Los individuos tienen razones para idealizar el pasado mientras se sienten ansiosos por el futuro. La mente colectiva del mercado, sin embargo, a menudo parece hacer evaluaciones más equilibradas y desapasionadas de las amenazas. Y el mensaje que los mercados están enviando ahora es que nuestros peores temores no se harán realidad.

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