Una de las conclusiones a las que arribaron los presidentes y secretarios generales de la Nueva Mayoría, que se reunieron la noche del martes para analizar los malos resultados logrados en las municipales, es que si bien sufrieron una “derrota política terrible”, al perder comunas emblemáticas, no fue una debacle electoral porque siguen siendo -a nivel de concejales- la primera fuerza en el país. En ese escenario convinieron que si no se unen frente a los desafíos que se avecinan, sobre todo con mira a las próximas presidenciales, sólo le estarán facilitando el camino a la derecha y a Sebastián Piñera para que regresen a La Moneda en 2018.
Por lo mismo, y aun cuando analizaron de manera “bastante autocrítica” -dicen- las razones del fracaso del pasado domingo, admitiendo los errores propios como los efectos de la cuestionada gestión gubernamental, concordaron en bajar el tono de las recriminaciones y le pidieron particularmente a la DC evitar las declaraciones y reproches que han venido haciendo “porque no sirven, ni ayudan”, asegura un dirigente del conglomerado, destacando la prudencia y moderación que asumieron hoy los líderes de la coalición oficialista.
Un punto de inflexión, agregan, al que también contribuyó el cambio de subsecretarios que se produjo durante la jornada de ayer y que estaba en conocimiento de todos los presidentes de la NM al momento de sentarse a la mesa que los congregó la noche martes.
En ese sentido, uno de los altos dirigentes del bloque destaca que una de las demandas de la coalición es que se hicieran las rectificaciones en la gestión del gobierno, labor que corresponde precisamente a los subsecretarios. Pendiente quedan otras correcciones a nivel de intendentes y de ministros, más puntualmente del equipo político.
Agenda y coordinación
En este cuadro y en una señal del rearme que apuesta a mostrar la NM, los dirigentes también concluyeron que la tradicional cita de los lunes con el comité político no es la mejor receta para mejorar la coordinación entre el bloque y el gobierno, pues “lo que se requiere -dice- un personero es una sana coordinación que incluya mayor conversación, complicidad y sintonía fina”, la que también pasa -agregan- por acotar la agenda programática en temas y proyectos que les permitan mostrar más unión que división.
Con ese desafío en mente, es que los presidentes y secretarios concordaron que cada partido preparará una propuesta que luego coordinaran de manera conjunta para entregarsela al gobierno en una cumbre que esperan sostener en los próximos días, una vez concluidos los cambios en los equipos que está realizando La Moneda.
Al respecto el secretario general del PS, Pablo Velozo, destaca que “los partidos de la NM van a asumir las responsabilidad que le quepan en esta derrota y conversarán en privado con el gobierno su opinión acerca de que es lo que se puede mejorar para los efectos de que esto no vuelva a ocurrir”.
¿Candidato único y lista parlamentaria?
Asimismo, resolvieron que cada coletividad debe fijar su cronograma con mira a las definiciones presidenciales y parlamentarias, de modo que cada partido tenga claridad respecto de los tiempos con que cuentan para adoptar las decisiones correspondientes, toda vez que el objetivo es llegar al abanderado presidencial único, para lo que también es determinante la definición que adopte la DC que ha anunciado la posibilidad de llegar a la primera vuelta presidencial.
Así, a la luz de los próximos encuentros de las instancias resolutivas con que cuenta cada una de las colectividades, en el bloque apuestan a que durante diciembre tendrán una claridad respecto de cómo deberían resolver el tema presidencial y donde la primaria siguen siendo la opción que más adeptos gana.
En paralelo, los secretarios generales también fueron mandatados para comenzar a trazar el camino respecto del desafío parlamentario, explorando la posibilidad de enfrentar con una o más listas las próximas elecciones para renovar el Congreso Nacional.
Goic modera tono en trato con el gobierno tras ajuste
Por Claudia Rivas A.
Antes de llegar a la cena del martes entre los máximos dirigentes de la Nueva Mayoría las presidentas de la DC, Carolina Goic, y del PS, Isabel Allende, se reunieron casi una hora, dando una señal de unidad que la senadora falangista estaba necesitando, pues su gallito con el gobierno no concitó el apoyo unánime en su partido. Tampoco generó el respaldo público de sus socios, aun cuando muchos aseguran que sí dieron en privado. Pese a todo, ayer en la mañana la dirigenta moderó el tono tras percibir algunas señales del Ejecutivo en orden a haber escuchado su reclamo.
La senadora DC concluyó una entrevista con Radio Cooperativa expresando su interés de que "podamos generar las condiciones para retomar el diálogo" con el gobierno, esperanza basada en el anuncio que la noche previa había hecho el vocero de gobierno, Marcelo Díaz, sobre cambios en el gabinete.
En el entorno de la timonel aseguran que las "señales" que recibieron del gobierno, en el marco de una negociación que estaría sosteniendo la propia Goic con el ministro de Interior, Mario Fernández, es que además de a los ajustes de ayer se sumarían en pocos días otros a nivel ministerial. De hecho, un cercano a la senadora Goic sostiene que "el gobierno se comprometió a considerar a la DC en los cambios y a darle un trato distinto en la construcción de la agenda".
Para el jefe de la bancada falangista –aliado incondicional de la timonel-, Fuad Chahín, la explicación del cambio de tono de la dirigenta se basa justamente en que el gobierno dio señales de reaccionar, lo que valoran.
Sin embargo, aclaró que el cambio en los equipos es sólo parte de un camino de solución y que "esperamos que pueda contribuir a sacar al gobierno de este empantanamiento político en el que se encuentra". Pero aclaró que el congelamiento se termina sólo si así se decide en el Consejo Nacional de hoy.
Pero en su entrevista en Cooperativa, la presidenta de la Democracia Cristiana hizo algo que no es habitual en ella, salió directamente al paso de las críticas de su antecesor en el cargo, el senador Jorge Pizarro: "Hace cinco meses yo asumía la conducción del partido con un partido cabizbajo, con la moral deprimida, y todos sabemos por qué. Y nosotros hicimos un compromiso con la probidad, tomamos decisiones consecuentes con eso. (...) Si no se hubiera producido un cambio (en la dirección) no sé cuál hubiera sido el resultado".
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