Señora Directora:
Uno de los aspectos más relevantes que van a ser discutidos en la Convención Constitucional, y que generan más temor por lo que pueda resultar, es el debate en torno al derecho de propiedad.
Defender este derecho es absolutamente fundamental, por cuanto, sin una definición clara y que le entregue un lugar destacado dentro de los otros derechos –que seguramente van a proliferar–, llevará a erosionar toda base de sustentación para el progreso de la sociedad. Puede que este derecho no se elimine del todo, pero el solo hecho que se antepongan otros derechos como a la educación, a la salud, a las pensiones, u otro, será suficiente para degradarlo y, de paso, aniquilar la principal columna sostenedora de la libertad del ser humano. Al fin y al cabo, si no tengo derecho a poseer el fruto de mi trabajo, paso a ser un esclavo de quien sí puede decidir sobre dicho fruto.
Desde este punto de vista, la defensa del derecho de propiedad no es sólo una cuestión de mayor o menor utilidad económica para el país, que sin duda lo es, sino que, principalmente, es una cuestión de carácter ético.
Félix Berríos Theoduloz
Economista