Columnistas

En la Fed, muy pronto para cantar victoria

Dalibor Eterovic Managing Director & Economist, The Rohatyn Group

Por: Dalibor Eterovic | Publicado: Viernes 19 de agosto de 2022 a las 04:00 hrs.
  • T+
  • T-

Compartir

Dalibor Eterovic

Desde inicios de año la economía global ha transitado por un estado macroeconómico caracterizado por sorpresas inflacionarias al alza y de crecimiento a la baja. Esta parte del ciclo requiere políticas económicas restrictivas para garantizar la convergencia de la inflación. Tasas de interés más altas y condiciones financieras más apretadas afectan negativamente los precios de activos financieros de mayor riesgo y duración, como las acciones globales, las monedas emergentes y los premios corporativos. Factores financieros como “growth” y “momentum” sufren, mientras “carry” y “value” se benefician de esta dinámica estanflacionaria.

“De no mediar un shock deflacionario desde China o Europa, es probable que las condiciones financieras deban seguir ajustándose”.

Es por este motivo que la reunión de política monetaria de la Reserva Federal (Fed) del 27 de julio y el reciente dato de inflación norteamericano han tenido efectos importantes en los mercados. Después de anunciar otra significativa alza de tasas de 75pb, el gobernador de la Fed pareció indicar que, dado que el nivel de tasas estaría cerca del neutral, el foco de política iría cambiando desde inflación a crecimiento.

La sorpresa a la baja del IPC de julio dio empuje a la noción de que sólo se requerirían ajustes de tasas graduales para llevar la inflación a la meta dentro del horizonte de política. El coeficiente de sacrificio, cuanto cae el producto a medida que se reduce la inflación, sería bajo y bastaría un leve crecimiento bajo potencial este año y el próximo para volver a niveles inflacionarios de 2%. Los precios de mercado reflejan este aterrizaje suave de la economía, al incorporar alzas de tasas a 3,5% a diciembre y sólo 10pb adicionales a marzo. De ahí en adelante, la Fed empezaría a recortar tasas de interés, llevando la TPM a neutral al cabo de dos años.

Varias razones llevan a pensar que es demasiado pronto para cantar victoria sobre la inflación en Estados Unidos.

Primero, el dato de inflación de julio está fuertemente influenciado por el precio de la energía, algo anticipable dada la caída en el precio del petróleo de 28% desde junio. Por otra parte, la inflación subyacente sigue mostrando persistencia. Medidas que buscan aislar efectos volátiles como Cleveland Median CPI apuntan a expansiones en torno a 6% anual, muy por sobre la meta.

Segundo, el mercado del trabajo se mantiene muy dinámico. El ultimo dato de empleo fue de 528 mil nuevos puestos de trabajo, al menos cuatro veces más que un nivel en línea con estabilidad en el desempleo. Los salarios nominales están creciendo sobre 6,5% anual, cifra consistente con la inflación subyacente expandiendo entre 4,5% y 5,5%, asumiendo productividad entre 2% y 1%.

Finalmente, como destacó el renombrado economista Larry Summers, la tasa neutral relevante, dado el nivel actual de inflación, se encontraría significativamente por sobre la que rige cuando la inflación esta en la meta. De no mediar un shock deflacionario desde China o Europa, es probable que las condiciones financieras deban seguir ajustándose. “Carry” de duración corta y “value” continuarían beneficiándose.

Lo más leído