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Un año de gobierno

Dentro de poco se cumplirá un año desde que asumió el presidente Piñera. Se trata de una fecha en la que es importante hacer...

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Dentro de poco se cumplirá un año desde que asumió el presidente Piñera. Se trata de una fecha en la que es importante hacer un balance de la labor del gobierno, y con los resultados, aprender y proyectar 2011. 


Una primera lección es que el mejor de los planes puede fallar por algo inesperado. Sorpresivamente para los recién llegados a La Moneda, ya no contaban con un 18% del PIB para desarrollar su proyecto, y debían tomar medidas urgentes. La evaluación de la reconstrucción merece un análisis extenso, pero podemos ver que en un año se ha levantado más del 50% de lo destruido por uno de los terremotos más grandes de la historia. Saque sus conclusiones. Por otro lado, durante este año de gobierno se crearon más de 400 mil empleos y creció la economía. En educación, hubo grandes cambios que beneficiarán a los alumnos y, por consiguiente, al país. 
Políticamente hablando tampoco salió todo como se planeó. El gabinete que estaba proyectado para todo el período presidencial fue renovado y el alza en el precio del gas en el sur implicó una gran crisis política. Otro punto importante es recordar que la decisión acerca de Barrancones fue para muchos un error, pasando a llevar la confianza de los inversionistas y la institucionalidad ambiental. Analizando estos hechos, y pese a algunos desaciertos puntuales, podemos decir, en general, que 2010 fue positivo, pero no podemos dejar de concentrarnos en lo que viene. Durante 2011 el presidente Piñera debe usar su liderazgo para materializar cambios urgentes para el país. Se debe consolidar la reforma educacional ya iniciada, para poder mejorar definitivamente la calidad de la enseñanza en Chile. Sería bueno además que en los proyectos de ley de toda índole se tenga en consideración la libertad de las personas y el desarrollo del país, para no ser oprimidos por regulaciones intrincadas e interminables que sofocan el emprendimiento. En este sentido, es necesaria una reforma que permita flexibilizar el mercado laboral, y el 2011 parece ser un buen momento para de una vez por todas materializarlo. Finalmente, y en el contexto de racionamientos de luz, es urgente dar una solución para que los proyectos de generación de energía puedan prosperar. 
Con estos 3 cambios –educacional, laboral y energético-, tendríamos un 2011muy positivo.

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