Comportamiento del empleo en Chile

El viernes pasado el INE dio a conocer la encuesta de empleo del trimestre febrero-abril, y al igual que en las dos publicaciones previas –y al registro de 12 meses atrás-, la tasa de desempleo a nivel nacional se situó en 6,1%. Se trata de una cifra muy favorable desde una perspectiva histórica, especialmente tomando en cuenta el poco dinamismo de la economía en los últimos 18 meses.

Sin embargo, es necesario tener en cuenta que tanto la expansión del empleo como de la fuerza de trabajo han sido muy moderadas en los últimos meses, de manera coherente con una economía poco dinámica. Así, si bien se habrían creado tan solo unos 66 mil puestos de trabajo en el último año, dado que únicamente 74 mil personas se han incorporado a la fuerza de trabajo, la tasa naturalmente se mantiene. Estos son valores bajo lo que podría considerarse positivo, ya que la población en edad de trabajar sube en más 200 mil personas al año.

La otra cara de este lento aumento de la fuerza de trabajo es el crecimiento de los inactivos, los que crecen 2,7% desde igual trimestres de 2014, lo que equivale a más de 150 mil personas, que por diversos motivos no desearían o no podrían, participar del mercado laboral. Un fenómeno que ha capturado la atención de muchos, en especial por el incremento de ciertas razones para no participar de la fuerza laboral, algo que no debe sobre interpretarse, pues la encuesta tiene un tamaño muestral adecuado para estimar desempleo, pero no para capturar correctamente parte de los cambios entre las múltiples razones tras la inactividad. Más que las razones, si algo nos debería preocupar, es la alta incidencia de las mujeres en este aumento de la inactividad.