Startup Ciudad Luz lanza nueva línea de negocio de generadores y almacenamiento con energía solar

Con el objetivo de masificar el uso de la energía solar, en 2013 los hermanos e ingenieros Tomás, Andrés y Matías Steinacker, y el ingeniero José Opazo, fundaron Ciudad Luz, especializada en energía fotovoltaica distribuida. Este año, lanzaron una nueva línea de negocio para usuarios de generadores diésel, un sistema que permitirá que estos operen con energía limpia y sin intermitencia en el servicio.

La startup partió con proyectos de generación fotovoltaica distribuida a nivel residencial e industrial, con un modelo en que ellos financian la instalación de los paneles solares. Parte de la energía generada es para el autoconsumo del usuario a un precio más barato y los excedentes se inyectan al sistema. A la fecha, cuentan con más de 60 accionistas que han permitido sostener este modelo, según su sitio web, en Chile y Colombia.

Tomás Steinacker comenta que buscaban “eliminar la barrera de entrada de la inversión inicial para contar con energía fotovoltaica. Y así, empezamos a vender un servicio, que es la energía. Un gran impulso fue la entrada en vigencia de la Ley de Net Billing”, que otorga el derecho al usuario a generar su propia energía.

Generadores con energía limpia

La nueva unidad de negocio está orientada a industrias y hogares que no tienen acceso a la red de energía eléctrica, como una faena minera, un hogar aislado o un evento artístico, para que puedan usar generadores que operan con energía fotovoltaica, gestionados por un software y un sistema de almacenamiento que permite mitigar las intermitencias en la disponibilidad de energía. Una solución, que "permite contar con una opción más sustentable a los generadores que operan con combustibles contaminantes”, afirma Steinacker.

Ecoflow Power Kit- se compone de tres partes: baterías de litio, paneles solares, un hub que emula estar conectado a la red energética, y el equipamiento eléctrico necesario para la conexión y puede alcanzar una potencia de hasta 10 kw y una capacidad de almacenamiento de hasta 15 kwh.

Steinacker explica que el sistema está pensado para industrias que no tienen acceso a la red, por ejemplo, la cadena de valor de la minería, las empresas de sondaje, las que hacen instalaciones de faena o para empresas de construcción modular, y “también para los hogares que están en zonas aisladas, como en San Pedro de Atacama o en el sur del país”.