Karen Thal, presidenta de Icare, cuenta que fue el miércoles 6 de septiembre, después de la reunión que todos los miércoles tiene la mesa directiva de la organización -integrada por Thal, Lorenzo Gazmuri, Hans Eben, José Guzmán y Mónica Álvarez- cuando surgió la idea de hacer un encuentro con líderes de opinión para hablar del tema constitucional.
“Como directorio estamos preocupados hace rato”, confiesa la también presidenta de Cadem. Durante esa reunión, a la que asistieron cerca de 150 personas, se habló de la elección que se viene en diciembre, en la que se deberá optar por “a favor” o “en contra” de la propuesta constitucional -en lugar de Apruebo o Rechazo- cuyo consejo este viernes inicia la votación de las enmiendas.
Después de aquella reunión, el tema continuó en el chat que agrupa a estas personas. Entonces, Patricia Núñez dijo: “No podemos mirar cómo esto fracasa”. Todos coincidieron que habia que hacer algo. “Somos un punto de encuentro. Tenemos que aportar al debate de manera constructiva”, apunta Thal. Entonces, surgió la idea de hacer un encuentro con los exPresidentes “con el propósito de que miren el asunto desde mas arriba”, dice la presidenta de Icare.
“Lo primero que había que dilucidar, era si había agua en la piscina”, añade. Entonces, entre todos, comenzaron a hacer las llamadas tanto a los expresidentes, como a los partidos políticos. En este trabajo también participó la consultora Perceptiva, de Magdalena Matte y Manuel Cereceda, que asesoran a Icare en diversas instancias. A los exmandatarios se les mandó una carta invitándolos, cuenta Thal, “en la que les planteamos que hoy más que nunca es urgente estar unidos y construir acuerdos en el proceso constitucional”.
“Fue increíble. Al día siguiente ya teníamos a Michelle Bachelet, Sebastián Piñera y Eduardo Frei confirmados”, comenta. Lo mismo sucedió con los partidos: representantes de todos los colores aceptaron la invitación. Todos salvo el PC que, pese a que no declinó ir, nunca confirmó su asistencia. “Así, en seis días organizamos todo”, agrega Thal.
Y añade: “Una de las cosas increíbles que me anima, es que todos aceptaron. El formato de conversación que diseñamos consistió en un panel de una hora que integrara a los ocho representantes de los partidos, la mayoría de ellos presidentes. Y todos concluimos que el idóneo para manejar un formato así sería Iván Valenzuela, quien también aceptó altiro, y debo decirlo, ad honorem, porque también lo vio como un aporte a la situación”, recalca Thal.
El martes en la mañana los organizadores y el periodista de Canal 13 y T13 Radio conversaron por Zoom las líneas generales y estructura del encuentro.
Alta convocatoria
Así, llegaron a El Golf 40, donde está la sede de Icare, a las 8:30 de la mañana del miércoles 13, Michelle Bachelet, Sebastián Piñera, y los panelistas de conversatorio; Javier Macaya (UDI), Diego Ibáñez (CS), Arturo Squella (PR), Francisco Chahuán (RN), Gloria Hutt (Evópoli), Juan Ignacio Latorre (RD) y Ana Lya Uriarte (PS). Esta última llegó representando a su tienda política pues la titular, Paulina Vodanovic, estaba en el Chile Day en Londres.
Varios coincidieron tras el encuentro que las intervenciones de Uriarte -quien salió de la Segpres a principios de este año y actualmente trabaja en el Ministerio de Energía- fueron de los puntos álgidos del debate. Además, la presidenta y el vicepresidente de los consejeros constitucionales, Beatriz Hevia (PR) y Aldo Valle (independiente PS).
Antes de que partiera la conversación todos comentaban impresionados “la excelente convocatoria”. En las mesas del salón -que estaba repleto- se veían directores de medios, economistas, empresarios y políticos. Entre ellos, Maximiliano Luksic, presidente de Canal 13; Francisco Silva, expresidente de Security; Baltazar Sánchez, de Empresas Claro; Andrés Benítez, gerente general de Copesa; Herman Chadwick; Macarena Pérez, socia de Econsult; Michelle Labbé, economista; Juan Carlos Jobet y Francisco Covarrubias, decano de la Escuela de Negocios y de la de Artes Liberales de la UAI, respectivamente; Ignacio Briones, presidente de Horizontal; Juan Antonio Coloma, senador UDI; entre muchos otros.
La primera en tomar la palabra fue Karen Thal. Apenas se subió al escenario, algunos comentaron en privado que el color de su traje de dos piezas -un verde intenso- era señal de la esperanza que ella tenía en que el asunto constitucional tuviera un desenlace positivo.
Tras ella, se exhibió un video en el que diversas voces representantes del país, manifestaban su preocupación por el tono de la política de estos meses. Detrás de la producción -cuyo material fue comentado después en la conversación- estuvo Felipe Cádiz, de la firma Reactor.
Luego, fue el turno de los exmandatarios. El primero, Eduardo Frei, quien estaba de viaje por lo que mandó un video. Luego, Bachelet, y al finalizar, Piñera. Al final, fue el turno del panel. La primera pregunta que le hizo Valenzuela a los politicos fue: ¿qué votará en diciembre? Al principio algunos titubearon, otros contestaron sin rodeos. La conclusión general, fue que, tal como estaba, con las enmiendas actuales, varios no aprobarían, sobre todo la centro izquierda.
La centro derecha, aunque también era crítica con las enmiendas del PR, de todas maneras, según lo señaló Chahuán, “hará todo el esfuerzo para cerrar el proceso con una nueva Constitución”. Otro punto a destacar, coincidieron varios de los presentes, es que a la mayoría le parecía que el borrador de los expertos era bueno, y que había que rescatar ese texto. Al finalizar, Valenzuela le dio la palabra al presidente del Senado, Juan Antonio Coloma, y luego, a la mesa del consejo constitucional (Valle y Hevia).
Sobre la jornada, Karen Thal, confiesa que está “más pesimista de lo que llegó. Estamos muy en la discusión chica. Cada uno está tratando de convencer al otro de que sus posturas son las correctas, me falta la mirada más de búsqueda de consenso pensando en el bien país. Si tratan de hacer una Constitución donde cada uno quiera escribir lo que quiera para Chile, tendremos un tercer proyecto constitucional rechazado. Y el país no aguantaría otro proceso. Me gustaría ver más disposición con mínimos comunes y llegar un acuerdo sensato”.
Y concluye: “Siendo justa, quizás algunos partidos están haciendo un esfuerzo por lograr ese diálogo. Veo a RD y CS más desafectados del proceso. Lo mismo con los Republicanos, quienes sostenían argumentos, a su juicio, ineludibles para el texto. Por estos tres grupos, más de los extremos, quedé preocupada. Mientras que el diálogo de Macaya y Ana Lya, fue esperanzador: en varios puntos no están de acuerdo, pero sí están de acuerdo en que deben abrirse y ceder en algo. Ese es el espíritu que necesitamos”.
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