El doctor en Ciencia Política de Science Po Grenoble y profesor de Periodismo de la USACH ha publicado artículos sobre cronopolítica, temporalidades periodísticas y series de televisión, en revistas y libros del mundo. Aquí entrega claves para seguir los comicios franceses:
“Todo indica que gana Macron, pero la segunda vuelta será otra elección. La extrema derecha podría llegar con el volumen de votos más altos de su historia, el actual Presidente tendrá pocas reservas de voto y la participación de la izquierda será decisiva. La derechización de Macron representa un riesgo en este escenario”.
La derechización de la política se acentuó los cinco últimos años. Para la primera vuelta, cerca de 65% de los votantes se inclinarían a la derecha o extrema derecha. Parte de la socialdemocracia se desplazó hacia la centro-derecha neoliberal, y parte de la derecha moderada hacia el antiliberalismo cultural de la extrema derecha. De carácter soberanista, esta última presenta dos candidatos –Marine Le Pen y Eric Zemmour– con altas intenciones de voto.
El debate público se focaliza en temas de seguridad e inmigración, claves de lectura de las otras problemáticas más globales. Macron hace un uso instrumental de estos temas en un programa que busca proteger la competitividad ante las incertidumbres, lejos de su alianza inicial entre socialdemocracia y centro-derecha. La izquierda se encuentra en una posición defensiva.
El medio independiente Mediapart produjo el documental Media Crash : qui a tué le débat public? (Media Crash: ¿quién mató el debate público?, 2021). Muestra los movimientos financieros que han incidido en el sistema mediático francés y el control del debate público por la derecha soberanista. Presenta el trabajo de agenda del grupo de Bolloré y cómo este presiona los medios de otras tendencias con el avisaje comercial.
Tiene resonancia en la campaña actual, en la que se ha denunciado la confusión entre política, polémica y entretenimiento, el monitoreo del tiempo de palabra de las y los candidatos, y la tradición del presidente-candidato que no debate.
Francia tiene una larga tradición de canción comprometida (chanson engagée). En mi generación, el hip hop ha sido el relevo de la canción a texto. Narra las desigualdades y frustraciones. Denuncia las condiciones de vida e injusticias. Lo llaman “rap consciente” y uno de los últimos temas populares es “Médine France” (2022).
Tercera generación de una familia migrante desde Argelia, Médine juega en este título con la idea de “Made in France”. Reivindica a la vez su origen francés y las raíces cosmopolitas que lo construyen. Se ubica del lado de los oprimidos. Denuncia las condiciones de vida actuales en Francia. Condena la mercantilización de la vida y el desmantelamiento del servicio público. Poco consensual, el artista divide.
Una Cifra Además de los dos candidatos o candidatas que clasificarán para la segunda vuelta, la abstención es la cifra que se debe atender el próximo domingo. Se prevé una participación baja, tal como lo fue el rating de los debates electorales.
La tasa de abstención dará señales sobre la falta de integración política de una parte de la población y sobre la (des)conexión entre oferta política y demandas sociales. Es crucial después de la pandemia, los chalecos amarillos y las fuertes críticas a la gestión general de Macron.
La candidatura que menos sufrirá de abstención es la que tiene más posibilidades de ganar. Marine Le Pen (extrema derecha) y Jean-Luc Mélenchon (izquierda) serían quienes más sufran el impacto de una participación baja.
La fragmentación de la izquierda se puede ver en la serie Baron Noir(2016-2020, en castellano en la plataforma RTVE), dirigida por Eric Benzekri, ex militante del PS. Aborda los clivajes internos en relación con la Unión Europea, la laicidad y entre un personal político tradicional y otro técnico.
El problema de encarnación sociológica aparece en la desconexión entre profesionales de la política y bases sociales, que anticipa las movilizaciones de los chalecos amarillos (2019). La serie problematiza las frustraciones que generaron las presidencias socialistas de 1981-1995 (François Mitterand) y 2012-2017 (François Hollande), indagando, como propuesta, en la posibilidad de unidad de la izquierda.
Un Escándalo Según un reciente informe del Senado, el gobierno pagó con fondos públicos al grupo privado McKinsey para asesoría en políticas públicas, prestaciones que no se realizaron en su totalidad. Esta empresa, cuyos integrantes trabajaron gratuitamente en la campaña de Macron de 2017, ha evidenciado incluso prácticas de evasión fiscal. Macron alega una maniobra política, pero el escándalo cuestiona su concepción de la acción pública, del conflicto de interés y de la evasión fiscal.
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