Corma en alerta por seguidilla de ataques en Los Ríos

Los nuevos ataques perpetrados en Lanco, Región de Los Ríos, tienen preocupados a los miembros de la Corporación de la Madera (Corma).

La violencia y reiteración con que los atentados incendiarios se están registrando -y que están posicionando a la zona como el nuevo epicentro del conflicto mapuche-, hizo que la agrupación reiterara su llamado al gobierno y las policías a desarticular los grupos violentistas que están operando en la región.

A través de una declaración pública, el presidente de la entidad, Fernando Raga, condenó de manera enérgica los hechos y expresó su solidaridad con los trabajadores y contratistas.

“Expresamos nuestra más enérgica condena ante estos hechos, donde sujetos intimidaron con armas de fuego a trabajadores y destruyeron nueve equipos de trabajo forestal”, señaló el máximo dirigente de la Corma.

Raga agregó que tanto en Los Ríos como en La Araucanía y el Biobío “se continúan violando derechos constitucionales al trabajo, al desarrollo de actividades económicas, a la propiedad privada y a vivir en paz”.

En ese contexto, dijo que es inaceptable que existan bandas de delincuentes armados que circulan con absoluta libertad “sembrando el terror y la destrucción, saboteando actividades productivas clave, como la agrícola, la forestal, el transporte y el turismo”.

Aún más, sostuvo Raga, es “inexplicable que existan grupos que se adjudican públicamente atentados, cuyos integrantes seguramente son conocidos, que no puedan ser desarticulados”.

Por ello, insistió en condenar las acciones de violencia que se siguen repitiendo, así como el constante amedrentamiento que existe hacia trabajadores y empresas.

“Se deben buscar soluciones en conjunto con el gobierno que permitan desarrollar acciones preventivas, labor de inteligencia y desarticulación de los grupos violentistas, para que las miles de personas que trabajan en los distintos sectores productivos, puedan desarrollar en armonía su trabajo”, insistió el dirigente del sector forestal.