Crece expectativa de un mejor ánimo empresarial tras un segundo año que escapó del pesimismo

El ánimo en el mundo de los negocios pareciera estar preparado para mejorar el año que se inicia. Así lo sugiere el Índice de Confianza Empresarial (ICE) que elabora el Centro de Estudios en Economía y Negocios -CEEN- de la Universidad del Desarrollo (UDD) en conjunto con Diario Financiero, que sumó en 2017 otro ejercicio aferrado a un nivel neutral, es decir, ni negativo ni positivo.

Específicamente, en diciembre el indicador marcó -2,9 puntos, lo que se compara con -0,1 punto del cierre de 2016, -8,4 puntos observado a igual período de 2015 y -19,9 puntos de 2014.

“Mirando hacia 2018, la confianza empresarial debiera repuntar gradualmente junto con las mejores expectativas respecto de las condiciones económicas nacionales e internacionales”, explican desde el CEEN, instancia dirigida por el economista Cristián Echeverría.

Como ha ocurrido en las recuperaciones económicas en el pasado, añaden que los avances en la confianza podrían ser más rápidos y notorios en algunos sectores que en otros, “en función de cómo se vea influida por los efectos específicos de la recuperación de la actividad económica sobre cada sector”.

Esto último cobra especial sentido a la luz de lo ocurrido en 2017, pues hubo algunos cambios entendidos como “relevantes” entre los sectores, destacando una mejora de la confianza en el rubro agrícola, en torno a un leve pesismismo, y el financiero, alrededor de un estado neutral.

En contraste, el ICE en la industria acusó un retroceso hacia un pesimismo moderado, y en la minería hacia un pesimismo leve.

Finalmente, en el comercio la confianza empresarial durante el año se consolidó en torno a un nivel neutral, con una notoria mejoría en el segundo semestre hacia un optimismo leve.

Finalmente, en el ámbito de la construcción el ICE se mantuvo en el nivel neutral de los últimos dos años.

Durante diciembre, por lo demás, cinco de las seis principales percepciones medidas por el CEEN-UDD y Diario Financiero exhibieron avances. Sin embargo, las variaciones fueron acotadas, no registrándose cambios de nivel en ninguna de ellas.

Lo más llamativo fue el aumento de casi seis puntos en la proyección de la situación económica del país, principalmente por un mayor optimismo en empresas grandes y medianas de los sectores agrícola, financiero y minero.

La percepción sobre el número de trabajadores subió cinco puntos, reflejando también mejores aires en los rubros del campo y minero.

En contraste, la proyección de la situación del negocio bajó casi siete puntos, donde destacó el menor optimismo en el área de la construcción.

Cifras alentadoras para el PIB

El resultado del ICE coincidió con un escenario de estabilidad inflacionaria y expectativas de crecimiento más favorables para el próximo año.

En particular, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) registró una variación mensual de 0,1% en noviembre, acumulando 1,9% en doce meses.

Mientras que el Banco Central de Chile, en su Informe de Política Monetaria de diciembre, proyectó una expansión del Producto Interno Bruto (PIB) de 1,4% para 2017 y, entre 2,5% y 3,5%, para el ejercicio que se inicia.

De corroborarse cualquiera de estos extremos, por ende, se tratará de un cuadro de recuperación.